Airbnb se regula en CDMX, ¿es suficiente para resolver el problema de vivienda?
La proliferación de edificios disponibles para utilizarse como Airbnb se convirtió en un detonante importante de la crisis de vivienda que aqueja a la CDMX (y al resto del territorio nacional). Cuando aumentan el numero de inmuebles que se usan como Airbnb, disminuyen los inmuebles disponibles para aprovecharse como viviendas de renta larga. Lo problemático en la disminución de inmuebles disponibles para rentas largas es que se elevan los precios. al haber menos, éstos se encarecen. La reforma para regular Airbnb parte de esta premisa, pues busca que los precios de las rentas bajen.
La problemática de vivienda está alcanzando niveles críticos. En su libro País sin techo, Carla Escoffié, afirma que las generaciones que vienen no tendrán acceso a tener una vivienda propia; a lo mucho, podrán rentar, pero nunca ser propietarios. Las causas del problema son multifactoriales. Entre ellas, está el tema de que no hay muchos inmuebles disponibles tanto para vender, como para emplear en rentas largas. Ello por que hay muchos edificios que requieren ser escriturados, pero también por la proliferación de la empresa Airbnb en territorio nacional.
¿Es suficiente?
La semana pasada, como medida para disminuir el problema, se aprobó en la CDMX la regulación de Airbnb. Ahora los alojamientos de la empresa solo pueden ser ofertados por 6 meses al año. A pesar del descontento de los propietarios de Airbnb, quienes piensan que la reforma es agresiva con su inversión, hay especialistas en el tema de vivienda que apuntan que:
“la regulación implementada en la Ciudad de México es todavía bastante laxa. Hay ciudades en donde Airbnb está de plano prohibido (Barcelona, Anaheim o Nueva Orleans) y otras en donde no se permite rentar unidades completas (Berlín, San Francisco, Londres, Nueva York o Santa Mónica) […] Limitar las rentas a 182 días al año es todavía muy permisivo. En París la limitación es de 120 días y en Londres de 90. En México, según datos de AirDNA, solo el 39% de las viviendas se rentan por más de 180 días al año. Esto significa que la mayoría de los anfitriones de Airbnb seguirán operando sin cambio alguno” (Viridiana Ríos, 07 oct 2024).
A pesar de que la reforma abarca solo un eslabón de los muchos que conforman la lista de causas del problema, y que ésta es bastante laxa; es por lo menos un paso en el intento de solucionar el problema de la escases de vivienda. ¿Es suficiente? No. Pero esperemos que este sea el inicio de una política pública que priorice las necesidades de los ciudadanos, y no la del capitalismo de las inmobiliarias.
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