Más de 70 Animales Rescatados Reciben Atención en el Centro Ecológico
El Centro Ecológico de Sonora se ha convertido en un verdadero santuario para animales rescatados o decomisados por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa). Diana Karen Durazo Ruiz, encargada de despacho de la Comisión de Ecología y Desarrollo Sustentable del Estado de Sonora (Cedes), informó que el centro alberga a más de 70 animales de diversas especies, brindándoles cuidado y una mejor calidad de vida.
Una Alianza que Data de 1985
Desde 1985, el Centro Ecológico de Sonora ha colaborado estrechamente con Profepa para recibir y cuidar a animales rescatados. Actualmente, el centro es hogar de 77 ejemplares de 30 especies diferentes, incluyendo caimanes, leones africanos, tigres de bengala, cacomixtles, tortugas del desierto y coyotes, entre otros.
Cuidado y Recuperación: Un Proceso Complejo
Diana Karen Durazo Ruiz explicó que los animales llegan en diversas condiciones y enfrentan múltiples escenarios al ser rescatados o decomisados. “Nosotros recibimos al organismo y le damos los cuidados necesarios para mejorar su calidad de vida lo más posible durante su estancia en el Centro Ecológico”, afirmó.
El equipo de veterinarios del centro se encarga de proporcionar alimentación, espacio y las atenciones necesarias para mejorar el estado de salud y ánimo de los animales, muchos de los cuales llegan en condiciones deplorables.
Procesos de Rescate y Acreditación
Durazo Ruiz detalló que existen dos procesos principales al recibir animales de Profepa. En el primero, el ejemplar es entregado temporalmente mientras se acredita su procedencia legal, ya sea que se cuente o no con los documentos necesarios. En el segundo proceso, si no se puede acreditar la procedencia o las condiciones de vida del animal no son adecuadas, el Centro Ecológico de Sonora lo recibe permanentemente y le brinda las atenciones necesarias para asegurar su bienestar.
Conservación y Educación Ambiental
El principal objetivo del Centro Ecológico de Sonora es conservar tanto la flora como la fauna que alberga y fomentar la educación ambiental. Diana Karen Durazo Ruiz subrayó la importancia de estas acciones para mejorar la calidad de vida de los animales dentro del centro y promover la conciencia sobre la conservación del medio ambiente.
Un Refugio de Esperanza
El trabajo del Centro Ecológico de Sonora no solo se limita a cuidar a los animales rescatados, sino que también representa un faro de esperanza para muchas especies en peligro. Con un equipo dedicado y comprometido, el centro continúa siendo un pilar fundamental en la protección y rehabilitación de la fauna en la región, demostrando que, con esfuerzo y dedicación, es posible brindar una segunda oportunidad a los animales que más lo necesitan.