La farmacéutica Eli Lilly anunció que invertirá un total de 5.300 millones de dólares en ampliar su capacidad de producción de dos fármacos para la diabetes y también utilizados para el control de peso, en un momento de gran demanda.
La inversión busca aumentar la producción de uno de los ingredientes activos de las inyecciones Zepbound y Mounjaro, llamado ‘tirzepatide’, y duplica las cifras planeadas inicialmente por la empresa para la nueva planta de Indiana donde se fabricarán, según un comunicado.
Eli Lilly, que recibió aprobación del regulador de EE.UU. para Mounjaro en 2022 y Zepbound en 2023, según la nota, vio dispararse sus ventas inmediatamente, y planea abrir la planta que está construyendo en Lebanon (Indiana) a finales de 2026.
La demanda de productos antidiabéticos que se usan alternativamente para la obesidad, encabezada por Ozempic y Wegovy, de Novo Nordisk, se ha disparado en los últimos meses y ha llegado a provocar escasez en algunos países en detrimento de los pacientes diabéticos.
En parte, la popularización de esos productos se debe a los comentarios de celebridades que han admitido usarlas, desde Elon Musk hasta más recientemente la influyente presentadora Oprah Winfrey.
El pasado febrero, Novo Nordisk, que reportó ventas récord en 2023 gracias a esos productos, compró una empresa especializada en relleno de agujas e inyecciones, Catalent, por 16.500 millones, y se hizo con tres nuevas plantas para aumentar su producción.
La demanda de los fármacos para la diabetes y la obesidad se ha convertido en un filón para el sector farmacéutico, y otras empresas como Pfizer y Amgen están centrando sus esfuerzos en desarrollar una oferta para aprovechar ese mercado.
Según estimó la firma de análisis Barclays el año pasado, el mercado de los fármacos contra la obesidad puede alcanzar los 100.000 millones de dólares en 2030.