Donald Trump, ex presidente de Estados Unidos y candidato presidencial republicano, volvió a hablar sobre el tema de la inmigración. En esta ocasión a los migrantes indocumentados de “animales” y “no humanos”.
Acompañado por agentes del orden, Trump destacó varios casos criminales que involucraban a sospechosos en el país de manera ilegal, usando términos crudos y gráficos para enfatizar su punto. Advirtió que si no ganaba las elecciones del 5 de noviembre, la violencia y el caos se apoderarían de Estados Unidos.
El candidato republicano mencionó a Laken Riley, una estudiante de enfermería de 22 años de Georgia presuntamente asesinada por un inmigrante venezolano que se encontraba en el país ilegalmente.
“Los demócratas dicen: ‘Por favor, no les llamen animales, son humanos’. Yo dije: ‘No, no son humanos, no son humanos, son animales'” señaló Trump.
Donald Trump ha sido conocido por sus declaraciones incendiarias sobre la inmigración, a menudo afirmando que los inmigrantes indocumentados son responsables de la criminalidad en Estados Unidos.
Por su parte, Joe Biden, rival político de Trump, culpa al ex presidente por desalentar a los republicanos de aprobar leyes que habrían fortalecido la seguridad en la frontera sur y reducido la inmigración ilegal.
Michael Tyler, director de comunicaciones de la campaña de Biden, condenó las declaraciones de Trump, calificándolas como una “retórica extrema que promueve la división, el odio y la violencia en nuestro país”.
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