La ciudad de Toluca, capital del Estado de México, se convirtió en escenario de un emotivo homenaje a Akira Toriyama, el creador de Dragon Ball, quien dejó un legado indeleble en la cultura pop mundial tras su fallecimiento el pasado 1 de marzo. A través de las redes sociales, miles de seguidores respondieron al llamado para reunirse en el emblemático Cosmovitral, marcando el inicio de una despedida masiva que trascendería fronteras.
Desde tempranas horas del mediodía, el Parque de la Ciencia Fundadores se llenó de energía y nostalgia al acoger a decenas de fanáticos, quienes, alzando sus manos hacia el cielo, ejecutaron un Genkidama simbólico en honor a Toriyama. Entre los asistentes se encontraban familias enteras, algunos vestidos como los icónicos personajes de la saga, como Goku y Vegeta, demostrando que Dragon Ball es más que una serie: es un fenómeno que ha tocado el corazón de generaciones.
Daniel, un padre de familia que participó en el evento junto a su hijo y esposa, compartió su sentir: “Lo vi por primera vez en 1986 y me enseñó mucho sobre la perseverancia, la amistad y la familia. Es triste saber que el creador ya no está, porque aunque la saga continúe, le faltará su esencia”. Este sentimiento de pérdida y agradecimiento fue una constante entre los asistentes, quienes también se dieron el tiempo para entonar canciones emblemáticas de la serie, como “Corazón Encantado” y “Cha-La Head-Cha-La”, creando un ambiente de camaradería y recuerdo.
El lugar elegido para este tributo, frente al Cosmovitral, no fue casualidad. Este sitio se destaca como un ícono cultural de Toluca, simbolizando la profunda relación entre Japón y México, un puente entre culturas que Toriyama ayudó a fortalecer con su obra.
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