La combinación de un invierno históricamente húmedo y un verano excepcionalmente caluroso en el oeste de EE.UU. ha generado preocupación entre los expertos en salud pública y control de mosquitos debido al incremento de casos del virus del Nilo Occidental. Los residentes están siendo alertados sobre la necesidad de tomar precauciones para evitar las picaduras de mosquitos.
Los especialistas en control de mosquitos han advertido sobre un aumento significativo en el número de estos insectos tras el deshielo primaveral en estados como Colorado, Utah y California. Además, muchos distritos ya están reportando la presencia del virus del Nilo Occidental en mosquitos, lo que indica que las condiciones climáticas son favorables para brotes localizados.
El virus del Nilo Occidental es la causa más común de enfermedades transmitidas por mosquitos en el territorio continental de EE.UU. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), miles de casos son notificados anualmente. Aunque aproximadamente el 80 % de las personas infectadas no presentan síntomas, el restante 20 % puede desarrollar fiebre, dolores musculares, dolor de cabeza y erupciones cutáneas. Una pequeña proporción de alrededor del 1 % puede desarrollar una enfermedad grave que afecta el sistema nervioso central, pudiendo causar parálisis o incluso la muerte.
La Dra. Vicki Kramer, del Departamento de Salud Pública de California, advierte que algunos pacientes pueden experimentar síntomas neurológicos durante años, lo que subraya la gravedad potencial del virus. Las personas mayores y aquellas con enfermedades preexistentes son las más vulnerables. Hasta el momento, no existen vacunas ni tratamientos específicos para el virus en humanos.
El virus del Nilo Occidental se propaga principalmente a través del mosquito Culex, que está presente en todo EE.UU. El ciclo de transmisión ocurre cuando los mosquitos pican aves infectadas y luego transmiten el virus a las personas. Por lo tanto, el seguimiento de las poblaciones de aves y mosquitos es esencial para controlar la propagación del virus.
Las autoridades de salud han observado un aumento inusual de casos en California, donde se han encontrado 147 aves muertas hasta el 28 de julio, casi el doble del promedio para esta época del año. Además, las muestras de mosquitos también han mostrado mayores concentraciones del virus en comparación con años anteriores.
Los expertos enfatizan la importancia de tomar medidas preventivas, como utilizar repelente de mosquitos, usar ropa de manga larga y pantalones largos cuando sea posible, especialmente al amanecer y al atardecer, y asegurarse de mantener las mosquiteras de puertas y ventanas en buen estado. También se recomienda eliminar cualquier fuente de agua estancada, donde los mosquitos depositan sus huevos. A pesar de las señales de alerta, se destaca que el aumento de la vigilancia no siempre se traduce automáticamente en un aumento de los casos humanos, debido a la complejidad de la cadena de transmisión del virus del Nilo Occidental.
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