El periodista Nelson Matus Peña, director del portal informativo Lo Real de Guerrero, fue brutalmente asesinado baleado en Acapulco, Guerrero. El crimen tuvo lugar en el estacionamiento de un centro comercial ubicado en la colonia Emiliano Zapata, en el bulevar Vicente Guerrero. Esta tragedia marca el segundo asesinato de un comunicador en menos de dos meses en Acapulco, lo que evidencia la grave situación de violencia que enfrenta la profesión periodística en la región.
Nelson Matus se encontraba en el estacionamiento de una tienda departamental cuando fue sorprendido por sujetos desconocidos alrededor de las 3:00 de la tarde. Los agresores dispararon contra él en varias ocasiones, impactándolo en el cuerpo y en la cabeza. El periodista cayó herido fuera de su vehículo de color negro. A pesar de la rápida respuesta de efectivos del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional, quienes acudieron al lugar, Matus Peña no pudo ser salvado y perdió la vida debido a la gravedad de sus heridas.
Peritos de la Fiscalía General del Estado realizaron las diligencias correspondientes en la escena del crimen y posteriormente ordenaron el levantamiento del cuerpo para ser trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo), donde se llevará a cabo la necropsia de ley. La violencia y la impunidad siguen cobrando vidas en la ciudad, dejando un profundo dolor en la comunidad periodística y en la sociedad en general.
Nelson Matus tenía una destacada trayectoria de más de 15 años en el ámbito periodístico, especialmente en la cobertura de temas policiales. Su labor se desarrolló en medios como Alarma, Agora Guerrero, y en los últimos años como director y responsable de la nota roja en Lo Real de Guerrero, uno de los portales más consultados en el estado. Esta lamentable pérdida deja un vacío en el periodismo local y es un recordatorio de los riesgos a los que se enfrentan aquellos que buscan informar y dar voz a la verdad.
Es importante destacar que este no es un caso aislado. Hace unos meses, Gerardo Torres Rentería, administrador del portal de red noticias de Lo Real de Guerrero, también fue asesinado en la Colonia Icacos por individuos desconocidos en su propio domicilio. Estos hechos reflejan la vulnerabilidad de los periodistas y la necesidad urgente de garantizar su seguridad y protección para que puedan ejercer su labor de manera libre y sin temor a represalias.
La comunidad periodística y diversos organismos defensores de los derechos humanos han condenado este brutal asesinato y exigido a las autoridades una pronta y exhaustiva investigación para identificar a los responsables y llevarlos ante la justicia. La impunidad en los casos de agresiones y homicidios contra periodistas es una afrenta a la libertad de expresión y socava la democracia y el Estado de derecho.