Astrónomos han localizado una inusual nube de gas y polvo estirarse y cambiar su velocidad en el centro de la Vía Láctea. El objeto, llamado X7, está orbitando alrededor del agujero negro supermasivo.
Los detalles del trabajo fueron publicados en The Astrophysical Journal.
Cerca del agujero negro supermasivo en el centro de la Vía Láctea, se observan objetos como cúmulos de estrellas o corrientes de gas y polvo, e incluso objetos G. Estas son formaciones compactas de gas y polvo, algunas de las cuales pueden ser sistemas estelares rodeados de fotosferas polvorientas extendidas.
Ahora, un grupo de astrónomos dirigido por Anna Ciurlo de la Universidad de California ha publicado un análisis de las observaciones de X7. La información del inusual objeto en el centro de la Vía Láctea se obtuvo en el rango infrarrojo por el Observatorio Keck. Aunque también en modo imagen (2002 – 2021), y en modo espectroscopia (2006 – 2021).
X7 fue descubierto en el año 2004 y es una estructura de polvo y gas filamentoso. Al igual que los objetos G, X7 exhibe emisiones de polvo calentado y gas ionizado. Se ha propuesto que se trata de una onda de choque causada por el viento de estrellas masivas o de un agujero negro supermasivo.
Otros astrónomos plantean que X7 sería el resultado de una interacción entre la capa circunestelar de una de las estrellas del cúmulo S y una corriente de partículas y radiación que emana de la vecindad del agujero negro.
Características de X7
No obstante, este análisis ha determinado que X7 se encuentra en una órbita ligeramente excéntrica y de período corto de 170 años alrededor del agujero negro. Actualmente, el objeto se ubica a una distancia de unas 4 mil unidades astronómicas de él. Se espera que en 2036 pase por el punto de su órbita más cercano al agujero negro.
Por otro lado, la versión de que X7 está asociada con la estrella S0-73 o con cualquier otra fuente puntual que estuvo cerca de ella durante el período de observación no ha sido confirmada. De igual forma, tampoco se ha verificado la versión de la onda de choque.
El equipo de Ciurlo determinó que la velocidad de movimiento de las partes de X7 cambió mucho con el tiempo. La velocidad radial de la cola permaneció casi sin cambios, mientras que la de la cabeza disminuyó.
En ese caso, las estructuras se alargaron fuertemente a medida que se acercaban al agujero negro. Sin embargo, no hay evidencia de que estuviera acompañado por un cambio significativo correspondiente en el brillo de la superficie. Se necesitan más estudios al respecto.
Los científicos se decidieron por la idea de que X7 es una nube de gas y polvo. Probablemente nació como resultado de un evento como una fusión estelar, la colisión de una estrella ordinaria o un objeto compacto con una gigante roja. También podría ser una eyección de material de una de las estructuras interestelares más grandes de esta región.