Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) se aparentemente se encuentra bajo investigación por presuntos actos de corrupción por parte de servidores públicos, debido a esto se han realizado auditorias para poder obtener la cifra de los supuestos daños.
Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), desde 2020 ha documentado la existencia de una supuesta red de corrupción dentro del órgano descentralizado, este lunes han dado a conocer la identidad de una mujer que fue usada para crear una empresa fantasma.
¿Quién es la mujer vinculada al caso Segalmex?
Se trata de Daffne Pomar Colín, quien fungió como prestanombre para la creación de la empresa Servicios Integrales Carregin, dicha que en 2020 firmó un convenio para vender azúcar a Segalmex.
MCCI informó que Daffne Pomar tiene un adeudo por 3 mil pesos con una tienda departamental que se generó luego que comprara un ropero y una cuna en marzo de 2021, menos de un año después de que se convirtiera en una proveedora de Segalmex.
En ese sentido, la organización civil puntualizó que ya fue denunciada ante la Fiscalía General de la República (FGR) por delincuencia organizada y lavado de dinero.
“Si bien los pedidos se cancelaron parcialmente, todavía quedan por recuperarse 80 millones de pesos por 4 mil 700 toneladas de azúcar que nunca se entregaron”, añadió MCCI.
De acuerdo con información con la organización de investigación, la firma Carregin también tiene como supuesto accionista a Jorge Saúl Romero.
La organización civil señaló que aunque ambas personas fueron utilizadas como prestanombres, la Fiscalía General de la República (FGR) ya giró órdenes de aprehensión en su contra. Además, destacó el hecho de que uno de los dos apoderados de Carregin participó también en otras dos empresas que han recibido de Segalmex contratos por 52 millones de pesos.
¿Cómo se dio el fraude?
MCCI señaló que la compra que se investiga comenzó el 23 de abril de 2020 cuandola Dirección Comercial de Diconsa firmó un convenio con Carregin y posteriormente generó 37 pedidos regionales por los que pagaría 465 millones de pesos para recibir 25 mil toneladas de azúcar estándar a granel en distintos almacenes del país.
Tres semanas después de la firma de dicho contrato, la empresa solicitó a Diconsa cancelar 36 de los 37 pedidos regionales argumentando dificultados logísticas provocadas por la contingencia sanitaria, motivo por el cual únicamente quedaría un pedido por 7 mil 800 toneladas.
No obstante y pese a que no se contaba físicamente con el producto, Segalmex depositó la cantidad total de los 145 millones de pesos pactados en las cuentas de Carregin.
En diciembre de 2020 dieron por terminada su relación laboral, sin embargo, Diconsa ya había pagado la totalidad de las 7 mil 800 toneladas de azúcar valuadas en 145 millones de pesos mientras que la empresa únicamente había entregado 3 mil 110 toneladas en los almacenes de Segalmex.
Tras esto Diconsa solicitó que Carregin realizara a más tardar el 31 de diciembre de 2020 una devolución a la cuentas bancarias de la dependencia por la cantidad de 88 millones de pesos, lo que es equivalente a las 4 mil 700 toneladas de azúcar que no se entregaron.