En el año 2019 el grupo parlamentario de morena y aliados, en el Congreso, aprobaron una reforma
que permitía que el Presidente de México, dispusiera de los ahorros generados en la Administración
Pública Federal, para lo que él quisiera, sin que tuviera que pedir permiso a la Cámara de Diputados,
quien es la que se encarga de aprobar el Presupuesto de Egresos.
Bueno esta Ley, que permitía usar los recursos de la Administración Pública Federal al Presidente, a
discreción, contrastaba con la propaganda en campaña y promesas que realizó el hoy Presidente,
refiriéndose a que en su gobierno existiría la total transparencia, sin embargo, nadie sabe en que usó
esos recursos y como los manejó.
Y en el mes de noviembre de 2020, se aprobó la Ley de Austeridad, los senadores de oposición como
lo fueron Mauricio Kuri del PAN, Miguel Ángel Osorio Chong del PRI, Dante Delgado, de Movimiento
Ciudadano, Miguel Mancera del PRD, y Emilio Álvarez de Icaza, presentaron una acción de
inconstitucionalidad, ya que la ley quitaba al congreso la facultad de destinar pero sobre todo de
vigilar los recursos del presupuesto federal.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación, la aceptó y la Ministra Norma Piña planteó el Proyecto, el
cual fue aprobado por 9 votos de la Corte.
Únicamente las ministras Loreta Ortíz y Yazmin Esquivel quienes votaron en contra, curiosamente,
propuestas las dos por el Presidente de México.
Y como era de esperarse con la Ley de Austeridad, que vulnera las facultades de la Cámara de
Diputados para vigilar y establecer los recursos públicos, se echó para abajo el control que tenía el
Presidente de México para ejercer de manera libre y sin rendir cuentas del dinero de la dichosa Ley
Por ello, es un acierto para la Corte al echar abajo la discrecionalidad de los recursos, y le da cierto
alivio a la Corte, después de su terrible actuación en las pasadas votaciones para la
inconstitucionalidad de la Ley Eléctrica.
Sin embargo, a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, aún les queda mucho
camino por andar para que la ciudadanía crea en su imparcialidad, y en la recuperación del Estado de
Derecho que se ha mermado en los últimos 3 años de este sexenio.
Alethia Hernández B..
