Salvo, comprometido con la protección del planeta, busca hacer la diferencia y convertirse en el lavatrastes más sustentable en México lanzando Salvo Pure. Esta nueva edición de Salvo está disponible en botellas hechas con 25%* de plástico reciclado post consumo (PCR), ayudando a promover el reciclaje, no contiene colorantes añadidos y se produce en una planta en la Ciudad de México que no envía residuos de manufactura a rellenos sanitarios.
Actualmente, todas las versiones de Salvo están hechas con ingredientes biodegradables que se descomponen por completo y de forma rápida en ambientes acuáticos y aeróbicos, en menos de 28 días, incluyendo el nuevo Salvo Pure. El rendimiento es una de las principales características de Salvo, ya que, cada gota rinde hasta 50% más, lo cual permite el uso de menos recursos y si se añade el uso de agua a temperatura baja al lavar platos, se logra la reducción de huella de carbono.
“En P&G, y en particular en nuestra marca Salvo, compartimos las preocupaciones ambientales latentes relacionadas con los recursos naturales como el agua, el cambio climático y los residuos; por ello tenemos la firme convicción de que cada una de las actividades que realicemos en favor del medio ambiente nos llevarán a un mejor futuro. Por eso, con la llegada de Salvo Pure, invitamos a todo México a sumarse haciendo pequeños cambios en su día a día, hacia un impacto positivo a través del consumo responsable” comentó Eduardo Álvarez Franyutti, director de Cuidado del Hogar, Oral y Afeitado en P&G México.
El compromiso de Salvo con el medio ambiente continúa y la marca se ha planteado metas muy puntuales en esta materia ya que para 2030 busca alcanzar el 100% de reciclabilidad o reutilización en sus empaques, producir con energía 100% renovable y reducir el 35% del consumo de agua en producción.