Andrés Manuel López Obrador, conocido como AMLO, cumplirá en diciembre el primero de sus seis años como presidente de México. Laurentino Cortizo Cohen, conocido como Nito, cumplió cien días como presidente de Panamá. Él y su canciller están enfocados en atraer inversión extranjera para que esta se concrete en empleos para los panameños.
¡Y Panamá es un imán! La Cepal indica que con solo el 10 % del total de la población centroamericana, captamos el 51 % de la inversión de esa región ($6.5 mil millones en 2018, $1.7 mil millones más que en 2017).
Recientemente, ese desempeño tiene dos explicaciones. Por un lado, en el sector de telecomunicaciones, llegó Millicom invirtiendo en la empresa Cable Onda. Por otro lado, en el sector industrial, llegó First Quantum Minerals invirtiendo en la empresa Cobre Panamá.
Dicho esto, ¿una posible ”venezolanización” de México beneficiaría a la economía panameña? Recordemos que desde el 2004, capitales venezolanos migraron con fuerza hacia Panamá. Aunque hubo un frenazo en 2008, con la crisis financiera global, para 2009 se registró un alza sostenida nuevamente. La Cámara de Integración Venezolana-Panameña indica que, en ese periodo, las inversiones venezolanas en Panamá fueron $10 mil millones.
México tiene un PIB cuatro veces más grande que el de Venezuela en 2009. ¿Qué volumen de inversiones mexicanas, atemorizadas allá, podrían venir a Panamá de 2020 en adelante? No lo sé, pero hay tres hechos que les invito a observar.
Primero: la renuncia de Carlos Urzúa. El ministro mexicano de Hacienda, abandonó el cargo, argumentando que el presidente AMLO le impuso trabajar con “funcionarios ignorantes de las finanzas públicas” y que el ambiente general allá apunta a poner en “entredicho el modelo económico mexicano”.
Segundo: la “Ley Armenta”. En referencia a Alejandro Armenta, senador mexicano, es una iniciativa para impulsar la recaudación fiscal. Reforma y adiciona diversas disposiciones de la ley federal contra la delincuencia organizada, la ley de seguridad nacional y el código nacional mexicano de procedimientos penales.
Aunque los empresarios mexicanos concuerdan en que debe impulsarse la recaudación fiscal, sienten que debe hacerse “sin generar terrorismo de Estado”. Señalan que, siendo México uno de los países latinoamericanos con más altos índices de corrupción, esquemas como el de la “Ley Armenta” pueden ser utilizados para la extorsión y la persecución política.
Aducen que conductas simples y reparables, podrán ser causales de prisión con gravedad de “delito contra la seguridad nacional”. Por ejemplo, será así, si el contador de cualquier ciudadano realiza una deducción que no pueda comprobar fehacientemente o incurra en alguna omisión de sus declaraciones provisionales, por más de un año.
Tercero: Crony Capitalism (capitalismo amiguista). AMLO, beneficia irregularmente a empresarios amigos de la cercanía al poder. Estudios comprueban que dicha práctica tiene efectos perversos en la competencia, al desincentivar la entrada de nuevos actores al mercado, afectando al consumidor con precios en aumento y calidades reducidas.
El amigo de AMLO, en este caso, se apellida Salinas. Ricardo Salinas Pliego es el segundo hombre más rico de México. Exitoso en banca, teledifusión y comercio al por menor, además, pertenece al Consejo Empresarial que asesora al presidente mexicano.
El Wall Street Journal investigó a Salinas por su relación al Grupo Fertinal, fabricante de fertilizantes. Argumentan que realizó una movida, precisamente del tipo que López Obrador denunció durante su carrera política y que prometió acabar como presidente.
Robbie Whelan y Dominic Chopping en la referida investigación, sugieren que “es posible” que Salinas se haya beneficiado irregularmente, al vender Fertinal, a precio inflado, a la empresa estatal Petróleos de México (Pemex).
Aunque el futuro es impredecible, eso no reduce los deseos del ser humano de prepararse para enfrentarlo. No es diferente en el caso de los empresarios que arriesgan su dinero, energía y tiempo.
Si las cosas continúan en México como hasta ahora o empeoran, es sensato anticipar que los jinetes charros, irán a cabalgar sus empresas en Panamá.