El presidente criticó la postura del CEO de Tesla contra su proyecto económico
El presidente Donald Trump expresó su molestia con Elon Musk tras la reciente salida del empresario de su gobierno, en medio de la creciente tensión por el proyecto de ley de recortes fiscales y gastos impulsado por los republicanos. Trump, desde el Despacho Oval, afirmó sentirse “muy decepcionado” por las críticas públicas del CEO de Tesla hacia la legislación, conocida como “Big Beautiful Bill Act”.
“Tenía una relación excelente con Elon. No sé si la seguiremos teniendo”, dijo el mandatario, señalando que Musk siempre se expresó bien de él, aunque ahora su postura puede cambiar. “Le he ayudado mucho”, añadió Trump, en alusión a los beneficios que recibió Tesla durante su administración, especialmente en temas regulatorios.
Musk critica el gasto y defiende principios fiscales
Por su parte, Elon Musk rechazó abiertamente el proyecto de ley, al considerarlo un “gasto escandaloso” que incrementará el déficit fiscal. A través de su cuenta de X (antes Twitter), calificó el paquete económico de “abominación repugnante” y llamó a los ciudadanos a comunicarse con sus representantes en el Congreso para frenarlo.
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Aunque Musk se mostró dispuesto a aceptar la eliminación de los créditos fiscales a vehículos eléctricos, su rechazo se centra en lo que definió como una “montaña de gastos innecesarios”. En otro mensaje, ironizó sobre el nombre del proyecto con un post que decía: “Slim Beautiful Bill para la victoria”.
Viejos aliados en conflicto
La tensión entre ambos personajes resalta por el peso que Musk tuvo dentro del equipo de Trump. Durante su gestión en el Departamento de Eficiencia Gubernamental, el empresario impulsó una fuerte reducción en el tamaño del Estado, incluyendo el recorte de miles de empleos federales y la eliminación de programas de ayuda exterior. Sin embargo, el impacto de estas medidas fue limitado: se logró apenas recortar la mitad del 1% del gasto federal.
A pesar del historial de cooperación —incluyendo un apoyo financiero de casi 300 millones de dólares por parte de Musk a los republicanos en 2024— la relación ha entrado en una fase pública de confrontación.
Impacto económico y político
El conflicto también tuvo repercusiones en el mercado. Las acciones de Tesla cayeron hasta un 6%, ampliando sus pérdidas tras los comentarios de Trump. Antes de sus declaraciones, ya acumulaban un descenso del 3%.
Mientras tanto, la Casa Blanca respaldó el proyecto de ley, asegurando que abriría una nueva era de crecimiento económico. En un comunicado con el estilo característico de Trump, la administración aseguró que “mejora drásticamente la trayectoria fiscal de Estados Unidos”.
El choque entre Trump y Musk marca un giro inesperado en una relación estratégica que combinó poder político con influencia empresarial. La evolución de esta disputa podría impactar tanto la agenda republicana como la campaña presidencial hacia 2026.
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