Acuerdan Bajar Impuesto a Remesas en EE.UU.
Se reduce del 5% al 3.5% tras negociaciones bilaterales
Washington, D.C., 22 de mayo de 2025 — El embajador de México en Estados Unidos, Esteban Moctezuma, informó este miércoles que, tras intensas negociaciones con el Comité de Reglas de la Cámara de Representantes, se logró reducir el impuesto a remesas del 5% al 3.5%. Esta reducción forma parte de una enmienda aprobada dentro del paquete de reconciliación fiscal promovido por la administración del expresidente Donald Trump.
La reducción del impuesto a remesas representa un alivio para millones de migrantes mexicanos que envían dinero a sus familias en México. Tan solo en 2024, el país recibió 64,745 millones de dólares por este concepto, lo que equivale aproximadamente al 4% del Producto Interno Bruto nacional.
La propuesta original, incluida en el proyecto conocido como “Gran y Hermoso Proyecto de Ley”, generó preocupación tanto en México como en sectores moderados del Congreso estadounidense. La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, rechazó el gravamen al considerarlo “injusto y discriminatorio”. Además, advirtió que la medida contraviene el tratado bilateral de 1994 que busca evitar la doble tributación entre ambas naciones.
Compromisos y desacuerdos en el Congreso
Aunque el ajuste al impuesto refleja un avance diplomático, el paquete fiscal mantiene recortes significativos a programas sociales como Medicaid, así como a incentivos fiscales relacionados con energías limpias. Estos recortes han generado tensiones dentro del propio Partido Republicano. Mientras los conservadores más duros del Comité de Presupuesto exigieron mayores recortes, algunos legisladores moderados expresaron su desacuerdo por los posibles efectos negativos en comunidades vulnerables.
La enmienda aprobada sobre el impuesto a remesas surgió como un punto de equilibrio en medio de estas discrepancias internas. No obstante, para el gobierno mexicano, la solución está lejos de ser ideal, ya que el gravamen no se eliminó por completo.
El nuevo impuesto afectará a más de 40 millones de migrantes en Estados Unidos. Diversas organizaciones defensoras de derechos migrantes, junto con el Caucus Hispano del Congreso, han advertido que la medida podría provocar un aumento en el uso de canales informales de transferencia de dinero. Esto, a su vez, incrementaría los riesgos de prácticas financieras no reguladas.
Un análisis reciente de BBVA estimó que, con el impuesto inicial del 5%, enviar 300 dólares de Estados Unidos a México podría haber costado hasta 23.50 dólares, en comparación con los 6 dólares actuales. Esta diferencia habría empujado a muchas personas a buscar alternativas menos seguras.
En semanas pasadas, la presidenta Sheinbaum instó a los migrantes mexicanos a expresarse ante sus congresistas estadounidenses, destacando cómo este impuesto impactaría directamente en su bienestar. Paralelamente, el Senado mexicano envió una comisión multipartidista a Washington para apoyar estas gestiones diplomáticas y defender los intereses de los migrantes.