- El PJEdomex trabaja con sensibilidad para garantizar derechos alimentarios y estabilidad familiar.
Cuando una separación transforma la dinámica familiar, garantizar el bienestar de las personas más vulnerables se convierte en prioridad; por ello, el Poder Judicial del Estado de México facilita el proceso de solicitud de pensión alimenticia, asegurando que las y los involucrados encuentren respaldo, orientación y justicia.
Este proceso inicia con la presentación de una demanda ante el juez familiar competente en el lugar donde reside la persona acreedora alimentaria. En el documento, se narran los hechos que fundamentan la solicitud, además de ofrecer pruebas como actas de nacimiento o matrimonio que acrediten el vínculo con quien requiere el apoyo.
Tras recibir la demanda, el juez analiza la situación y, si identifica la necesidad, fija un monto provisional de pensión alimenticia. Esta cantidad, calculada en función del salario mínimo diario, un porcentaje del ingreso de la persona deudora o una cifra líquida, permite atender necesidades inmediatas mientras el juicio avanza.
El procedimiento sigue con la notificación a la parte demandada, quien puede contestar y presentar pruebas en su defensa. Posteriormente, en la audiencia inicial, el juez busca mediar para alcanzar un acuerdo entre las partes. Si no se logra la conciliación, se admiten las pruebas y se revisan las medidas provisionales, preparando el camino hacia la audiencia principal.
En esta última etapa, se realizan estudios en materia de trabajo social y se solicitan informes de capacidad económica para determinar las necesidades de subsistencia y los ingresos de las partes. Al concluir la recepción de pruebas, el juez dicta sentencia, resolviendo si existe la obligación alimentaria y, de ser así, estableciendo el monto correspondiente.
La pensión alimenticia es un derecho que abarca la provisión de alimentos, los gastos de vivienda, salud, vestimenta, esparcimiento y educación, priorizando el interés superior de las niñas, niños y adolescentes. Además, reconoce que cada resolución impacta directamente en la dignidad y calidad de vida de quienes más lo necesitan.
Con sensibilidad y compromiso, las y los jueces del Poder Judicial mexiquense trabajan para garantizar el acceso a una justicia equitativa, donde las familias puedan encontrar estabilidad, apoyo y esperanza.
