Toma precauciones ante el aumento de las temperaturas
México está a punto de experimentar el regreso de altas temperaturas con la llegada de la primera ola de calor de la temporada. Después de un inicio de año marcado por bajas temperaturas, se prevé que el clima cambie drásticamente, trayendo consigo días calurosos que podrían afectar a diversas regiones del país.
La primera ola de calor podría manifestarse a finales de enero o principios de febrero, según informes del Servicio Meteorológico Nacional (SMN). Las áreas más afectadas serán principalmente el norte, occidente y centro del país, donde las temperaturas podrían superar los 35°C e incluso alcanzar los 40°C en algunas zonas. Esta ola de calor se debe a un fenómeno atmosférico que provocará un incremento de la radiación solar y un ascenso en la temperatura ambiental.
Impacto esperado y zonas afectadas
De acuerdo con expertos meteorológicos, las olas de calor no solo se caracterizan por altas temperaturas, sino también por la sensación térmica de humedad que incrementa el riesgo de deshidratación y golpes de calor. Las entidades más vulnerables durante este fenómeno incluyen Baja California, Sonora, Sinaloa, Chihuahua, y las zonas de la Costa del Pacífico, donde los efectos del calor podrían ser más intensos.
El impacto en las grandes urbes también es considerable, ya que las ciudades con alta densidad poblacional, como Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey, experimentan lo que se conoce como “isla de calor urbano”, una condición que amplifica las temperaturas en las zonas más densamente urbanizadas debido a la acumulación de calor por la infraestructura y la actividad humana.
Precauciones y recomendaciones
Es importante que la ciudadanía tome precauciones para mitigar los efectos de las altas temperaturas. Se recomienda mantener una hidratación adecuada, utilizar ropa ligera, protegerse del sol con bloqueador solar y sombreros, y evitar la exposición directa al sol durante las horas más calurosas del día, especialmente entre las 12:00 p.m. y las 4:00 p.m. Las autoridades locales también sugieren estar atentos a los avisos meteorológicos y tomar medidas para evitar la deshidratación, como el consumo regular de líquidos.
Además, las personas con condiciones de salud preexistentes, niños y adultos mayores deben ser especialmente cuidadosos, ya que son los grupos más vulnerables a los efectos del calor extremo.
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