Los incendios en California siguen azotando comunidades, y la amenaza de fuertes vientos podría empeorar la situación en los próximos días. Las autoridades estadounidenses han emitido alertas por vientos “fuertes y peligrosos” que podrían propagar las llamas hacia zonas residenciales de Los Ángeles, donde ya se han reportado al menos 16 muertes.
Deanne Criswell, directora de la FEMA, advirtió que los vientos se están volviendo más intensos y podrían alcanzar hasta 80 km/h, avivando los incendios que ya han destruido comunidades enteras. En el caso del incendio de Palisades, las llamas continúan avanzando hacia áreas clave, como el Getty Center y el Valle de San Fernando, poniendo en riesgo vidas y propiedades.
Un desafío climático y humano
El gobernador Gavin Newsom anunció planes de reconstrucción, pero destacó que el principal desafío en estos momentos son los vientos, que están empeorando las condiciones. A medida que la expansión urbana pone a más personas en riesgo, el cambio climático, alimentado por el uso excesivo de combustibles fósiles, está potenciando estos desastres naturales.