Nearshoring y su impacto ambiental en México

Nearshoring y su impacto ambiental en México

¿Qué es el nearshoring?

El nearshoring es una estrategia empresarial que traslada operaciones de manufactura y servicios a países cercanos al mercado objetivo, reduciendo costos de transporte y tiempos de entrega. En México, esta tendencia ha atraído inversiones extranjeras significativas, consolidando al país como un eje clave para la cadena de suministro global. Sin embargo, su auge también presenta retos ambientales.

Alerta sobre los riesgos ambientales

Manfred Mauricio Quintanilla Hernández, experto en medio ambiente, ha señalado que, aunque el nearshoring reduce las emisiones del transporte internacional al acortar distancias logísticas, genera presión sobre los recursos naturales e infraestructura local. Según Quintanilla, el desarrollo acelerado de parques industriales puede ocasionar problemas como deforestación y sobreexplotación de recursos hídricos, especialmente en regiones con servicios limitados.

El experto destaca que el transporte marítimo, responsable de grandes emisiones de CO₂, se ve parcialmente mitigado con el nearshoring, ya que fomenta cadenas de suministro más sostenibles. Sin embargo, el impacto ambiental local puede superar estos beneficios si no se gestionan adecuadamente los recursos.

Soluciones para un desarrollo sostenible

Para contrarrestar los efectos negativos del nearshoring, Quintanilla Hernández propone medidas concretas:

Adopción de tecnologías limpias: Incorporar energías renovables como la solar y la eólica en las operaciones industriales.

Economía circular: Reutilizar recursos, como el agua, dentro de los procesos industriales para evitar su desperdicio.

Uso responsable de la tierra: Planificar los desarrollos industriales para minimizar la afectación ambiental.

Regulación estricta: Implementar políticas que garanticen el cumplimiento de estándares ecológicos por parte de las empresas.

Además, Quintanilla enfatiza la importancia de incentivos gubernamentales que favorezcan proyectos sostenibles. Esto incluye asegurar que los nuevos desarrollos industriales cuenten con acceso a servicios básicos responsables, sistemas de transporte eficientes y tecnologías amigables con el medio ambiente.

El nearshoring representa una oportunidad única para impulsar la economía mexicana, pero también demanda un enfoque ambiental responsable. Según Quintanilla Hernández, un desarrollo sostenible solo será posible mediante la implementación de prácticas empresariales equilibradas que consideren tanto el crecimiento económico como la preservación del entorno.


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