¿Los gatos podrían ser transmisores de Gripe aviar?
Un reciente estudio, publicado el 17 de diciembre, ha encendido las alarmas sobre el papel que podrían desempeñar los gatos domésticos en la evolución del virus H5N1 de la gripe aviar. Según los investigadores, estos felinos podrían facilitar mutaciones que conviertan al virus en una forma más peligrosa para los humanos.
Desde que el H5N1 comenzó a circular entre el ganado lechero, ha causado la muerte de numerosos gatos, principalmente en granjas con rebaños infectados, y ha enfermado al menos a 60 personas en contacto cercano con vacas lecheras o aves de corral infectadas. Aunque el virus no se propaga fácilmente entre humanos, solo serían necesarias una o dos mutaciones clave para que esto ocurra.
Riesgo Latente y Posibilidades de Mutación
Hasta ahora, no hay evidencia de que los gatos hayan transmitido el H5N1 a personas, ni de que representen una vía principal para la evolución del virus. Sin embargo, los expertos advierten que si un gato se infecta simultáneamente con el H5N1 y un virus de gripe estacional, podrían generarse mutaciones que permitirían al virus propagarse eficazmente entre humanos.
“El contacto frecuente de los gatos con animales silvestres y personas los convierte en un posible intermediario en la evolución del virus”, afirmó Suresh Kuchipudi, microbiólogo veterinario de la Universidad de Pittsburgh y autor del estudio.
Déficit en la Vigilancia y Riesgos Subyacentes
El estudio también expone la necesidad de fortalecer la vigilancia de la gripe aviar en gatos. A pesar de los brotes en ganado lechero, las pruebas del virus H5N1 en vacas y personas han sido limitadas, dejando un vacío de información sobre la magnitud real del brote.
La semana pasada, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) anunció que comenzará a realizar pruebas en el suministro nacional de leche para identificar rebaños infectados. Sin embargo, no se han implementado esfuerzos similares para monitorear otros animales de granja o mascotas, lo que deja un importante punto ciego en la vigilancia.
“Enfocarse exclusivamente en la seguridad alimentaria y la vigilancia humana podría estar desviando la atención de un problema más amplio y en evolución”, advirtió Kuchipudi.
Vacíos en la Responsabilidad Gubernamental
Un desafío clave radica en que ningún organismo gubernamental supervisa específicamente a los animales domésticos. Mientras que el USDA monitorea el ganado y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) se encargan de la vigilancia en humanos, los animales de compañía quedan fuera del radar institucional.
¿Una Crisis Silenciosa?
El panorama descrito por el estudio subraya la urgencia de una estrategia más integral. Si bien el riesgo inmediato parece limitado, la posibilidad de que el H5N1 evolucione en una amenaza global sigue latente. La coordinación entre autoridades sanitarias, agrícolas y veterinarias será crucial para prevenir un escenario que podría tener graves implicaciones para la salud pública.
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