El involucramiento de Toledo en el caso Odebrecht y su sentencia a 20 años de prisión
Acusación de sobornos
Según las investigaciones, Toledo habría recibido $20 millones de dólares de Odebrecht a cambio de otorgarle la licitación del tramo II y III de la Carretera Interoceánica Sur. El dinero fue supuestamente canalizado a través de cuentas en paraísos fiscales y empresas offshore, con la ayuda de su amigo y empresario israelí Josef Maiman, quien sirvió como intermediario.
Las revelaciones sobre Toledo surgieron en parte gracias a las confesiones de exfuncionarios de Odebrecht, quienes, como parte de acuerdos con las autoridades brasileñas y peruanas, revelaron los detalles del esquema de sobornos. Los testimonios señalaron que los pagos a Toledo se hicieron a lo largo de varios años, y que este utilizó su posición de poder para garantizar que Odebrecht obtuviera los contratos.
Fuga y extradición
Después de dejar la presidencia, Toledo residía en Estados Unidos, donde se refugió mientras las investigaciones avanzaban en Perú. En 2017, la justicia peruana emitió una orden de captura internacional contra Toledo, y en 2019, el gobierno peruano solicitó su extradición a Estados Unidos, acusándolo de lavado de dinero y colusión. Después de un largo proceso judicial, Toledo fue extraditado a Perú en abril de 2023 para enfrentar cargos.
Condena a 20 años de prisión
En septiembre de 2024, un tribunal peruano lo condenó a 20 años de prisión por los delitos de colusión y lavado de activos en el marco del caso Odebrecht. Este veredicto marca un hito importante en la lucha contra la corrupción en el país, siendo Toledo el primer expresidente condenado en este escándalo que ha sacudido a varios líderes peruanos.
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