¡Llego la hora, llego la era de “La Doctora” Claudia Sheinbaum en México!

Por Salomón Rosas

 

Con el título de “La Doctora” se refieren a ella ya la gran mayoría de la clase política nacional de Morena; también así se le suele mencionar en los círculos periodísticos y en las mesas de café en todo el país; incluso con ese mote ya se le conoce en las colonias populares, barrios y ejidos de todo México a Claudia Sheinbaum Pardo. A la primera mujer presidenta de México, a “La Doctora Sheinbaum”se le reconoce su alta preparación académica y su sólida formación profesional; más aún se ha extendido y socializado que “La Doctora” es muy ordenada y sistemática; que tiene visión y claridad estratégica; y que es una mujer de carácter firme que toma decisiones. Estamos hablando de la mujer que tomará protesta y posesión del cargo político más alto de la Nación el próximo martes 1 de octubre y que ejercerá el mandato constitucional de seis años (2024-2030) para el que fue electa el pasado 2 de junio. Que nadie olvide que “La Doctora” obtuvo el respaldo de 35.9 millones de votos que representaron el 59.7% del total de los sufragios emitidos; que a nadie escape el dato que con el resultado logrado, “La Doctora” se convirtió en la mandataria más votada de la historia de nuestro país; que nadie omita el hecho del respaldo popular del que goza “La Doctora”; y, por lo tanto, que todos sepan que en la persona de Claudia Sheinbaum, de “La Doctora”, se concentra toda la fuerza y la legitimidad del poder de la Presidencia de la República, con todo lo que eso significa y conlleva, para ordenar y conducir los destinos nacionales. ¡Llego la hora! ¡Llego la Era de “La Doctora” Claudia Sheinbaum en México!

Hablamos de una era que se inicia con “La Doctora” porque comenzará un periodo histórico -tal vez de gran extensión en el tiempo- que no tiene precedentes en México. “La Doctora” ya pidió licencia en su partido Morena porque sabe y ha asumido que le toca gobernar al 100%, a la totalidad, de las y los mexicanos y construir el “Segundo piso de la Cuarta Transformación”. Primera mujer presidenta; mujer respetable; mujer respetada por afines y adversarios; mujer culta; madre; esposa; mujer coherente y consecuente; mujer prestigiada; mujer líder, leal a sus principios y convicciones. Aunque muchos no la conocemos de cerca hemos sido testigos de su actuar y de sus reacciones en estos meses recientes de precampaña y campaña electoral y, más recientemente, hemos ya conocido sus decisiones y visto su actitud  previo a su toma de posesión por lo que podemos afirmar que “La Doctora” tiene el temple, la ecuanimidad y la madurez que se necesitan para gobernar a un país tan complejo como lo es México en la actualidad y para enfrentar los retos enormes y aprovechar también las grandes oportunidades que están a la vista.

 

 

En materia económica, recuperar el crecimiento, atender los temas fiscales y arreglar Pemex son algunos de los desafíos más relevantes; en ese mismo sentido, y por la relevancia que para el presente y el futuro tiene el tema, es necesario recordar lo que Marcelo Ebrard Casaubon, Secretario de Economía designado por “La Doctora”, nos hace ver ante el gran reto y la gran oportunidad que enfrentamos en la revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) ya que presenta un grado de dificultad mayor en relación a 2018 por el excesivo proteccionismo que impulsa nuestro vecino del norte y por la batalla estratégica que hay que dar para ganar en la relocalización de empresas y el afamado nearshoring. En otro orden de ideas, advertir y reconocer el enorme reto de combatir con inteligencia y eficacia al crimen organizado y mejorar las condiciones de la seguridad de la población es indispensable ya que es una situación que también tiene un impacto directo en la competitividad y en la confianza para invertir en nuestro país. No menos relevantes son los temas de la educación y la salud mismos que, además de que requieren de políticas públicas consistentes, fueron afectados sensiblemente por la pandemia que vivimos y de la cual apenas estamos saliendo. El apoyo a las mujeres, a la niñez y a los adultos mayores sabemos son prioridad en la agenda de “La Doctora”; también existe un reto particular en cuanto a las relaciones diplomáticas, y podemos hablar de que hay un compromiso serio del gobierno de “La Doctora” con el medio ambiente, entre muchas cosas más.

Ahí están los retos y las oportunidades. La tarea es enorme y sin duda hay mucho que hacer por delante, por eso hay que priorizar las cosas para avanzar en la ruta del desarrollo; sin embargo, es necesario señalar que “La Doctora” no podrá sola y que para que tenga éxito requiere del apoyo y de la unión de las y los mexicanos y es por ello por lo que, sin regateos, es indispensable que trabajemos al lado de “La Doctora” para que nos vaya bien a todos. Desde la precampaña y hasta esta última etapa de la transición política y gubernamental “La Doctora” se ha conducido con aplomo, serenidad y determinación. Todo lo anterior nos invita a pronosticar que el gobierno de “La Doctora” marcará un parteaguas no solo en la vida pública y política de México sino también en otros ámbitos de la vida social, comunitaria y cultural de nuestra nación. La dimensión histórica de su responsabilidad política y la visión para asumirla con un nuevo enfoque desde la perspectiva de mujer -con todo lo que ello significa- y con las cualidades que ya hemos destacado nos motivan a asegurar que en “La era de la Doctora Claudia Sheinbaum” muchas cosas cambiarán en México y si todos nos aplicamos serán para bien. ¡Así sea!