A partir de hoy, los usuarios del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro en la Ciudad de México podrán utilizar sus tarjetas bancarias de débito y crédito para acceder al servicio a través de los torniquetes, eliminando la necesidad de cargar una tarjeta de transporte recargable. Esta nueva modalidad está disponible en casi todas las líneas del Metro, exceptuando la Línea 12, donde el sistema comenzará a funcionar dentro de 15 días.
Un avance en la modernización del Metro
La medida forma parte de un esfuerzo de modernización impulsado por el STC para facilitar el acceso a los usuarios y reducir el uso de efectivo. Ahora, los pasajeros podrán pagar el costo del boleto, que sigue siendo de 5 pesos, con tarjetas Visa, Mastercard o American Express, siempre que cuenten con la tecnología de pago sin contacto (contactless). Además, los pagos se podrán realizar a través de teléfonos y relojes inteligentes sin ningún costo adicional o comisión para el usuario.
El director del STC, Guillermo Calderón, destacó que la implementación de este nuevo sistema pone fin a un largo proceso de modernización del sistema de recaudo, proyecto que fue iniciado durante la administración de la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo cuando era jefa de gobierno. Calderón señaló que esta innovación marca un hito en el uso de la tecnología para mejorar el servicio y brindar más opciones a los usuarios.
Inversión en tecnología y mejoras en el servicio
El proyecto de modernización incluyó una inversión total de 835 millones de pesos, destinada a la adquisición de nuevas máquinas de venta y recarga de tarjetas, así como validadores, torniquetes y dispositivos en las 195 estaciones del Metro. Este sistema permitirá que los usuarios accedan de manera más ágil y segura a los trenes, reduciendo las filas en las taquillas y facilitando el uso de medios de pago electrónicos.
Guillermo Calderón explicó que la implementación de las tarjetas bancarias para el pago en el Metro no representó un costo adicional para el sistema, gracias a convenios establecidos con las principales instituciones bancarias. De esta manera, se asegura que los usuarios puedan hacer uso de sus tarjetas sin preocuparse por cargos extra.
El debut del nuevo sistema en la estación Zaragoza
La estación Zaragoza de la Línea 1 fue el escenario del lanzamiento oficial de este sistema de pago con tarjetas bancarias. Durante el evento, se pudo observar cómo algunos usuarios, especialmente aquellos que no están familiarizados con el sistema, tardaban un poco en adaptarse a la tecnología. Uno de ellos fue Ricardo Estrada, un migrante mexicano que actualmente reside en Las Vegas y se encontraba de visita en el país junto a su hija Verónica.
Al utilizar por primera vez las máquinas de venta, Estrada mostró interés en la tarjeta de transporte recargable, pero se alegró al enterarse de que también podía pagar con su tarjeta bancaria. “Esto es excelente para los que venimos de viaje”, comentó, aunque finalmente decidió llevarse la tarjeta recargable como un recuerdo de su visita a la Ciudad de México.
Beneficios para usuarios y turistas
La introducción del pago con tarjetas bancarias no solo beneficiará a los habitantes de la Ciudad de México, sino también a turistas nacionales y extranjeros que visiten la capital. Al eliminar la necesidad de adquirir una tarjeta especial para el Metro, se facilita el acceso a uno de los sistemas de transporte más importantes de la ciudad, lo que mejora la experiencia de los viajeros.
Para los usuarios frecuentes del Metro, esta innovación es una opción más conveniente que les permite realizar pagos de forma rápida y sencilla. Además, el sistema de pago sin contacto se integra con las tendencias globales de digitalización y movilidad, lo que coloca al STC en un estándar similar al de otras grandes ciudades del mundo.
Próximos pasos en la modernización del STC
Aunque el pago con tarjetas bancarias ya está disponible en la mayoría de las líneas, aún se espera que la Línea 12 implemente este sistema en las próximas semanas. El STC ha adelantado que seguirá buscando formas de mejorar el servicio y adaptarse a las necesidades de los usuarios.
Con esta medida, el Metro de la Ciudad de México se suma a otras ciudades que han adoptado sistemas de pago sin contacto, mejorando la eficiencia y ofreciendo mayor comodidad a los usuarios.