En una medida que impactará directamente a los consumidores, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) de México ha anunciado la eliminación total del subsidio al Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) que se aplica a las gasolinas Magna, Premium y Diésel. Esta decisión implica que, a partir del sábado 7 de septiembre y hasta el viernes 13 de septiembre, los usuarios deberán cubrir el 100% del IEPS en cada litro de combustible adquirido.
Aumento de Costos para los Consumidores
Con la eliminación del subsidio, los automovilistas que utilicen gasolina Magna, el combustible más utilizado en el país, tendrán que pagar una cuota íntegra de 6.17 pesos por cada litro. Los usuarios de gasolina Premium enfrentarán un pago de 5.21 pesos por litro, mientras que aquellos que dependan del Diésel deberán pagar 6.78 pesos por litro. Este aumento afecta tanto a los conductores particulares como a los autotransportistas, quienes verán un incremento considerable en sus costos operativos.
La medida llega justo antes del fin de semana largo por las fiestas patrias, un momento en el que tradicionalmente aumenta la demanda de combustible debido al desplazamiento de millones de mexicanos que celebran la independencia del país.
Contexto Económico y Movimientos del Tipo de Cambio
Este ajuste en el subsidio coincide con un contexto económico complicado en México. En la última semana, las protestas contra la reforma judicial discutida en el Congreso de la Unión han generado volatilidad en los mercados financieros. Como resultado, el peso mexicano perdió fuerza y el tipo de cambio superó la barrera de los 20 pesos por dólar, una cifra que no se había visto desde octubre de 2022. Esta depreciación del peso implica costos adicionales para la importación de combustibles, un factor que, sumado a la eliminación del subsidio, podría traducirse en mayores precios en los próximos días.
Tendencia de Subsidios en 2024: Un Año de Altibajos
A lo largo de 2024, los subsidios al IEPS han experimentado variaciones. En mayo y junio, la gasolina Magna no recibió subsidios, situación que se repite ahora. Durante gran parte del año, la SHCP ha mantenido en cero los estímulos fiscales para la gasolina Premium y el Diésel, obligando a los consumidores a pagar la totalidad del IEPS. Esta política de eliminación de subsidios forma parte de una estrategia fiscal del gobierno para manejar los ingresos y las finanzas públicas, en un esfuerzo por mantener la estabilidad económica ante las fluctuaciones del mercado global y los desafíos internos.
Repercusiones en el Transporte y la Economía
La eliminación de subsidios al IEPS afecta no solo a los conductores particulares, sino también a la cadena de suministro en el país. Los transportistas, que dependen en gran medida del Diésel, verán un aumento en sus costos operativos, lo que podría tener un efecto en cascada sobre los precios de bienes y servicios en todo el país. Este aumento de costos es especialmente relevante para la industria del transporte de mercancías, que juega un papel crucial en la economía mexicana.
Perspectivas y Expectativas Futuras
Los analistas económicos advierten que la eliminación del subsidio podría influir en la inflación, especialmente si la volatilidad del tipo de cambio persiste. Dado que México importa una parte significativa de su gasolina, cualquier depreciación del peso frente al dólar puede aumentar el costo de importación, que a su vez se transfiere a los consumidores finales.
Frente a este panorama, la medida podría ser temporal si las condiciones económicas mejoran. Sin embargo, si la inflación y el tipo de cambio continúan en niveles altos, es posible que la SHCP mantenga su postura de no subsidiar el IEPS, lo que requeriría a los consumidores ajustar sus presupuestos y hábitos de consumo ante los precios más altos del combustible.