Martí Batres anuncia reforma judicial en CDMX con enfoque en desventaja social

El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres Guadarrama, anunció la publicación de una reforma judicial que busca incorporar una “perspectiva social” en el acceso a la justicia. El objetivo de la medida es priorizar a ciudadanos en desventaja social, como aquellos en situación económica precaria, marginados o pertenecientes a comunidades indígenas.

La reforma actualiza los principios que guían la función jurisdiccional en la capital, con el fin de garantizar que los grupos vulnerables tengan un acceso preferencial a la justicia. “Se priorizará a las personas y grupos sociales en algún tipo de desventaja social“, indicó Batres.

Desigualdad en el sistema judicial

Desde el patio del Antiguo Palacio del Ayuntamiento, Batres señaló que el sistema judicial presenta una estructura desigual, donde las personas con recursos económicos suelen evitar la cárcel. “Muchos pobres están en las cárceles, mientras que aquellos con dinero logran librar la prisión y los procesos judiciales“, advirtió.

El jefe de Gobierno subrayó que esta situación refleja una justicia que favorece a quienes tienen poder adquisitivo, lo que contrasta con la situación de los sectores más desfavorecidos de la sociedad.

Superación de la igualdad formal ante la ley

Batres explicó que esta reforma pretende ir más allá de la simple “igualdad formal ante la ley“. Consideró que este enfoque, si bien importante, no es suficiente para reconocer las desigualdades reales en la impartición de justicia. La reforma busca que los jueces y funcionarios judiciales tengan en cuenta las condiciones de vulnerabilidad de las personas cuando se enfrentan al sistema de justicia.

La reforma permitirá sensibilizar a los juzgadores para detectar las condiciones en las que ocurren los hechos y considerar la vulnerabilidad y desigualdad de los involucrados“, añadió Batres.

Principio de justicia social en la Constitución local

Por último, el mandatario recordó que la Constitución de la Ciudad de México ya reconocía el principio de “justicia social“, aunque este no se había vinculado directamente a la función jurisdiccional. Con la reforma, se pretende fortalecer este principio y aplicarlo de manera efectiva dentro del sistema judicial.

La reforma judicial busca, en última instancia, reducir las brechas de desigualdad y hacer de la justicia un derecho accesible para todos, especialmente para aquellos en condiciones de mayor vulnerabilidad.