Viruela del Mono: Lo que Necesitas Saber sobre la Emergencia Sanitaria en 2024

Un Nuevo Brote Global que Preocupa a la OMS

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado en 2024 una nueva emergencia sanitaria global debido al resurgimiento de la viruela del mono, también conocida como viruela símica. Esta decisión llega tras la confirmación de varios casos en diferentes partes del mundo, recordándonos los brotes que comenzaron en Europa en 2023 y se extendieron rápidamente a otros continentes, incluido México. Pero, ¿qué es exactamente la viruela del mono? ¿Cómo se contagio? ¿Deberíamos preocuparnos? Aquí te proporcionamos respuestas a las preguntas más importantes sobre esta enfermedad.

¿Qué es la Viruela del Mono?

La viruela del mono es una zoonosis viral, lo que significa que se trata de una infección que se transmite de animales a humanos. Es causado por el virus del género Orthopoxvirus , perteneciente a la familia Poxviridae . Aunque originalmente la transmisión ocurre principalmente a través del contacto con animales salvajes como roedores o primates, en los brotes recientes se han registrado casos de contagio entre humanos.

¿Cómo Surgió y Cuándo se Detectó por Primera Vez?

Este virus no es nuevo. La viruela del mono fue identificada por primera vez en humanos en 1970, en la República Democrática del Congo, cuando un niño de nueve años contrajo la enfermedad. Desde entonces, se ha considerado endémica en las zonas rurales de la cuenca del Congo, especialmente en la República del Congo. Además, se han reportado casos en otros 11 países africanos como Benín, Camerún, Nigeria y Sierra Leona.

Se han identificado dos variantes genéticas del virus: una en la cuenca del Congo y otra en África Occidental. La variante de la cuenca del Congo es conocida por ser más virulenta y contagiosa.

¿Es la Primera Vez que la Viruela del Mono Sale de África?

No, el virus ha salido de África en varias ocasiones anteriores. En 2003, un brote afectó a más de 30 personas en Estados Unidos, quienes contrajeron la enfermedad tras estar en contacto con perritos de la pradera infectados. Además, se han registrado casos en Israel, Reino Unido y Singapur en años recientes.

¿Cómo se transmite y cuáles son los síntomas?

La viruela del mono se transmite a través del contacto directo con sangre, fluidos corporales, lesiones en la piel o mucosas de animales infectados. Aunque no se ha identificado un reservorio natural, se cree que los roedores son los principales portadores del virus. El consumo de carne mal cocida de animales infectados también representa un riesgo.

La transmisión de persona a persona es limitada, pero puede ocurrir a través de gotitas respiratorias en contacto cercano, contacto con lesiones cutáneas o superficies contaminadas. El periodo de incubación varía entre 6 y 13 días, y la enfermedad se desarrolla en dos etapas: la primera, con fiebre, dolor de cabeza intenso, inflamación de los ganglios linfáticos, dolores musculares y falta de energía; y la segunda, con la aparición de erupciones cutáneas similares a las de la varicela.

¿La Viruela del Mono Puede Ser Letal?

Aunque la viruela del mono puede ser letal, especialmente en niños pequeños, no es común. Las complicaciones pueden incluir bronconeumonía, sepsis, encefalitis e infecciones oculares. La tasa de letalidad varía entre el 0% y el 11%, siendo más alta en los niños.

¿Existe Algún Tratamiento o Vacuna?

Actualmente, no existe un tratamiento específico para la viruela del mono. El manejo de la enfermedad se basa en tratar los síntomas. Tampoco hay una vacuna específica disponible para el público general, aunque la vacunación contra la viruela ha demostrado ser efectiva en un 85% para prevenir la viruela del mono.

En 2019, se aprobó una nueva generación de vacunas contra la viruela, pero estas aún no están disponibles para la población en general.

¿Cómo se puede prevenir la viruela del mono?

La prevención de la viruela del mono se basa en reducir la exposición al virus. Es crucial evitar el contacto sin protección con animales salvajes, especialmente aquellos enfermos o muertos, y cocinar adecuadamente cualquier alimento de origen animal. En cuanto a la transmisión de persona a persona, es fundamental evitar el contacto cercano con personas infectadas y seguir medidas de higiene rigurosas.