Una turista resultó herida en el brazo luego de que un caballo de la Guardia Real en Londres la mordiera mientras intentaba tomarse una foto.
Las imágenes capturadas frente al Museo de la Caballería Real muestran a una multitud de turistas rodeando al guardia y su corcel, ansiosos por capturar un recuerdo fotográfico. Sin embargo, el caballo, visiblemente incómodo por la atención, comenzó a mover la cabeza y morder a las personas que se acercaban demasiado, como forma de advertencia.
En un momento dado, una mujer, con una gorra de béisbol negra y una camiseta de Pink Floyd, se apresuró a colocarse junto al animal, ignorando las señales que advertían sobre las posibles mordeduras y patadas. Lamentablemente, el caballo no dudó en reaccionar, mordiéndola en el brazo.
La turista, desprevenida por el ataque, gritó y corrió hacia sus acompañantes, mientras la multitud observaba y grababa lo que ocurría. El grupo comenzó a examinar la herida y un hombre intentó limpiarla con un bastoncillo de algodón. Sin embargo, la condición de la mujer empeoró rápidamente, y se desplomó por completo.
El propio guardia real rompió su protocolo por un segundo y señaló a uno de los asistentes para que buscara a la policía. El hombre hizo caso y en cuestión de segundos llegaron uniformados para atender a la víctima.
A pesar de la presencia de oficiales atendiendo a la turista herida, las demás personas continuaron aglomerándose alrededor del guardia y su caballo, algunos incluso intentando acariciar al animal inquieto.
Por todo el lugar hay carteles que advierten a los visitantes sobre las posibles mordeduras de los caballos y los riesgos que implica acercarse a tomar una foto.