Tras el polémico incidente conocido como el ‘portazo’ previo a la Final de la Copa América 2024 entre Argentina y Colombia, CONMEBOL, el ente rector del fútbol sudamericano y organizador del evento, ha emitido un comunicado deslindándose de las responsabilidades por los acontecimientos ocurridos en el Hard Rock Stadium de Miami.
El domingo 14 de julio, cientos de aficionados irrumpieron en el recinto de Miami, sobrepasando la capacidad del estadio diseñado para 65,326 espectadores y retrasando el inicio del partido por más de una hora. A pesar de los esfuerzos por controlar la situación, el evento deportivo se vio afectado por el desorden generado.
En su comunicado, CONMEBOL afirmó que fueron las autoridades del Hard Rock Stadium quienes tomaron las decisiones cruciales para manejar la situación de emergencia, conforme a los acuerdos contractuales establecidos para la seguridad y operación del evento.
Además, el organismo deportivo reveló que había recomendado medidas específicas a las autoridades del estadio, las cuales no fueron implementadas adecuadamente, a pesar de ser prácticas estándar en eventos de esta magnitud.
CONMEBOL expresó su pesar por los incidentes, destacando que los actos de violencia perpetrados por individuos malintencionados ensombrecieron lo que debía ser una celebración deportiva memorable para todos los involucrados.
El comunicado no proporcionó detalles sobre los daños materiales ocasionados en el estadio, ni sobre las personas afectadas o los problemas de salud reportados tanto dentro como fuera del recinto deportivo.
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