Peste bubónica: síntomas, tratamiento y todo lo que necesitas saber
Síntomas y tratamiento de la enfermedad
Las autoridades de salud de Colorado confirmaron un caso de peste bubónica, convirtiéndose en el tercer caso registrado en Estados Unidos este año, después de los detectados en Oregón y Nuevo México. La peste bubónica es una enfermedad grave causada por la bacteria Yersinia pestis, que puede provocar síntomas severos si no se trata adecuadamente.
El departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de Colorado informó que el paciente se infectó con la bacteria Yersinia pestis. Hasta el momento, se desconoce el lugar o el modo de contagio. La peste bubónica afecta principalmente a roedores pequeños y sus pulgas, como ratas, ratones, ardillas y conejos. Para los humanos, la forma más común de contagio es a través de la picadura de una pulga infectada.
¿Qué es la Peste Bubónica?
Según la Clínica Mayo, la peste es una enfermedad grave causada por la bacteria Yersinia pestis. Esta bacteria reside mayormente en roedores pequeños y sus pulgas. La peste bubónica se manifiesta con la hinchazón de los ganglios linfáticos, pequeños filtros en forma de frijol del sistema inmunitario. A estos ganglios linfáticos hinchados se les llama bubones, y de ahí proviene el nombre de la enfermedad.
Síntomas
Existen tres tipos de peste: bubónica, septicémica y pulmonar, cada una con síntomas diferentes.
Peste bubónica:
– Hinchazón de los ganglios linfáticos en las axilas, ingle o cuello.
– Fiebre alta repentina y escalofríos.
– Dolor de cabeza.
– Cansancio y malestar general.
– Debilidad y dolor muscular.
– En raras ocasiones, llagas en la piel.
Peste septicémica:
– Fiebre alta repentina y escalofríos.
– Debilidad extrema.
– Dolor de estómago, diarrea y vómitos.
– Sangrado de la boca, la nariz, el recto o debajo de la piel.
– Signos de choque, como convulsiones, sarpullido y presión arterial baja.
– Ennegrecimiento y muerte del tejido (gangrena) en los dedos de las manos y los pies, orejas y nariz.
Peste pulmonar:
– Fiebre alta repentina y escalofríos.
– Tos con sangre en la mucosidad.
– Dificultad para respirar.
– Dolor en el pecho.
– Malestar estomacal y vómitos.
– Dolor de cabeza y debilidad.
Tratamiento
Normalmente, la peste bubónica se puede tratar con antibióticos, y el tratamiento temprano es crucial para la recuperación. Si no se trata, la peste bubónica puede ser mortal. Las autoridades de salud recomiendan buscar atención médica inmediata si se presentan síntomas de peste tras una picadura de pulga o contacto con roedores.
Este caso de peste bubónica en Colorado pone en alerta a las autoridades sanitarias y destaca la importancia de la prevención y el tratamiento oportuno de esta enfermedad. Aunque es rara, la peste bubónica sigue presente y puede tener consecuencias graves sin la intervención adecuada.
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