Mujeres mexicanas optan por tener solo un hijo

Mujeres mexicanas

La tasa de fecundidad en México ha experimentado una notable disminución en las últimas décadas. Según un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en 1960, las mujeres mexicanas tenían un promedio de seis hijos. Sin embargo, en 2021, ese promedio se redujo drásticamente a sólo un hijo.

Factores Detrás de la Disminución de la Tasa de Fecundidad

El informe de la OCDE señala que las tasas de fertilidad están disminuyendo globalmente, ya que las mujeres tienen hijos a una edad más avanzada o deciden no tenerlos en absoluto. En México, la edad promedio en la que las mujeres se embarazan es ahora de 30 años, una cifra que refleja un retraso significativo en comparación con generaciones anteriores.

México no es el único país que enfrenta esta tendencia. Otros países donde las mujeres tienen en promedio sólo un hijo incluyen Francia, Estados Unidos, Australia, Costa Rica, Reino Unido, Alemania, Noruega, Canadá, Grecia, Japón, Italia, España y Corea del Sur. Esta tendencia global sugiere un cambio en las prioridades y circunstancias de las mujeres en diferentes partes del mundo.

Obstáculos que Retrasan la Maternidad

Varios factores contribuyen a esta disminución en la fertilidad:

  • Acceso a la Anticoncepción: La disponibilidad y el uso de métodos anticonceptivos han permitido a las mujeres planificar y espaciar sus embarazos.
  • Aumento de la Educación: Las mujeres están dedicando más tiempo a su educación, lo que retrasa la edad en la que tienen su primer hijo.
  • Establecimiento en el Mercado Laboral: La necesidad de establecerse profesionalmente y alcanzar la estabilidad financiera antes de tener hijos es una prioridad para muchas mujeres.
  • Equilibrio Trabajo-Vida Familiar: Las dificultades para equilibrar las demandas laborales y familiares disuaden a las mujeres de tener más hijos.
  • Acceso a la Vivienda: El acceso limitado a la vivienda adecuada y asequible es otro factor que afecta las decisiones de maternidad.

La tendencia de tener menos hijos tiene diversas implicaciones sociales y económicas. La disminución en la tasa de fecundidad podría afectar el crecimiento demográfico y la estructura de la población en el futuro. Además, plantea desafíos para las políticas públicas relacionadas con el apoyo a las familias, la educación y la vivienda.


🚀 Si buscas mantenerte al día con las noticias nacionales e internacionales más relevantes 🌐

¡Este canal es para ti!