Los Aliens de Tampico y los Huracanes: Detrás del Mito

El Enigma de Tampico y los Huracanes

En la costa de Tamaulipas, la ciudad de Tampico ha sido notoria por una curiosa leyenda que asegura que los aliens han estado protegiendo la región de los embates de huracanes y ciclones durante décadas. Este mito resurgió recientemente con la llegada de la tormenta tropical Alberto, que tocó tierra en Ciudad Madero, vecina de Tampico.

La Historia del Mito

La historia se remonta a 1966, cuando el huracán Inés devastó el Caribe, las Bahamas, Florida y parte de México, incluyendo Tamaulipas. Este huracán dejó a 84,000 personas sin hogar y destruyó más de 2,500 casas en su paso, pero desde entonces, ningún otro huracán de igual magnitud había impactado directamente la zona de Ciudad Madero y Tampico, hasta el reciente paso de la tormenta tropical Alberto.

La Teoría Alienígena

Según la leyenda, los aliens mantienen una base submarina frente a la playa Miramar, donde operan para desviar los huracanes lejos de Tampico y Ciudad Madero. Esta base, conocida como Amupac, supuestamente se encuentra bajo las aguas en una zona limítrofe entre Tamaulipas y Veracruz. Los avistamientos de ovnis en la región han alimentado esta teoría, con informes de objetos no identificados emergiendo y sumergiéndose a gran velocidad en el mar.

Explicaciones Científicas

Sin embargo, los expertos plantean explicaciones más terrenales para la ausencia de huracanes en la región. Irandi Gutiérrez, profesor de la Escuela de Ingeniería y Ciencias del Tec de Monterrey, sugiere que las temperaturas del agua en el Golfo de México y la geografía norteamericana podrían ser determinantes. En invierno, las temperaturas costeras en Tampico alcanzan los 23°C, aumentando a 25°C en primavera y 28°C en verano y otoño, creando condiciones que pueden desviar o debilitar huracanes.

La variabilidad térmica, según Gutiérrez, puede alterar la masa de aire y desviar los huracanes hacia otras rutas, como hacia las planicies de Estados Unidos o hacia el Istmo de Tehuantepec, dejando a Tampico relativamente indemne.