FOTO EXPLICADA NO VALE

La fotografía juega un papel crucial en política: captura momentos, transmite mensajes poderosos, moldea la percepción de líderes y consigue que las imágenes tengan impacto, empatía, inspiren confianza y movilicen la opinión pública.

Como bien lo dice DAVID ROSS, quien a juicio de muchos es el mejor retratista del mundo: “tener buenas fotos que no necesiten ser explicadas, enamoran, entran al subconsciente como un relámpago de vivencia y elocuencia que ninguna otra forma puede alcanzar jamás”.

Los políticos acuden a la fotografía como herramienta de comunicación y así destacan logros, se acercan a la ciudadanía y construyen imagenes, documentan momentos
que crecen en la memoria colectiva, ahora bien esto jamás puede ser una mezcla de coincidencias a expensas del azar del obturador.

Aún cuando parece sencillo, captar la atención del público y generar un vínculo tiene una magia que no necesita de trucos, de ahí que el producto de millones de disparos se traduzca en una sola imagen para campañas publicitarias, plataformas digitales y material promocional, donde la imagen confirma apoyo y credibilidad en el mundo de la política.

Es imperdonable dejar algo tan importante como la fotografía a expensas de un entusiasta aprendiz, sin duda se vale hacer carrera, pero los años darán al buen fotógrafo la capacidad de entender la mezcla entre composición, iluminación, colorimetria y expresiones que capturan un lente.

Una imagen impactante habla por sí sola y llega donde tiene que llegar, incluso va más allá de la necesidad de un individuo de aparecer en la foto para cumplirle al ego y la vanidad, me explico: para cualquier modalidad como retrato, reporteros gráfica, líneas editoriales o infografia, dependiendo del caso, siempre hay estrategia.

Evitar sobre saturar de imágenes debe ser un propósito, tan determinante como saber capturar visualmente eventos, discursos, reuniones y momentos relevantes, no es tan simple como documentar gráficamente la actividad política,

En el ámbito político todos quieren aparecer en la foto, ser vistos en situaciones de liderazgo, mantener cercanía ciudadana o participar en eventos relevantes, ojalá estén preparados para entender que existe monotonía visual y falta de autenticidad, deben contribuir a una narrativa visual más dinámica y atractiva.

“El mejor fotógrafo sabe que quiere la gente y poco debe preocuparse por tu necesidad de ser bonito antes que útil”.

Por FREDDY SERRANO DÍAZ
Estratega Político