La crisis migratoria y las extremas temperaturas han confluido en una tragedia en la frontera entre México y Estados Unidos. Este lunes 3 de enero se confirmó la muerte de cuatro migrantes debido a un golpe de calor mientras intentaban cruzar la frontera.
Las víctimas, cuyos decesos ocurrieron durante el fin de semana, fueron reportadas por varios solicitantes de ayuda. El personal de la Patrulla Fronteriza acudió al llamado, alertando a otros migrantes sobre los peligros mortales del intenso calor.
Según las autoridades estadounidenses, las temperaturas en la región han alcanzado los 40 grados centígrados, presentando un riesgo significativo para aquellos que intentan cruzar la frontera de manera ilegal.
Respuesta del gobierno
El Gobierno de Estados Unidos se pronunció sobre la tragedia, señalando que “se ha observado un aumento en lesiones por calor y deshidratación, así como en fatalidades entre migrantes que intentan cruzar la frontera ilegalmente en el Sector El Paso, ya que las temperaturas han superado los 100 grados Fahrenheit en los últimos días.”
Además de los cuatro fallecidos, se informó que varias personas han sufrido enfermedades graves relacionadas con el calor en esta peligrosa travesía.
Las autoridades fronterizas reiteran su llamado a la precaución, subrayando la letalidad de las altas temperaturas y los riesgos que enfrentan los migrantes en su intento por alcanzar el sueño americano.
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