El abuso de bebidas alcohólicas preparadas puede provocar daños irreversibles en el corazón, riñón e hígado, ya que no aportan ningún nutrimento saludable y su consumo se ha popularizado, por lo que especialistas del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) hacen un llamado a la población sobre la importancia del autocuidado a través de la alimentación y evitar la ingesta de alcohol.
La jefa de la Unidad de Capacitación de la Escuela de Dietética y Nutrición (EDN) del instituto alertó que el consumo de bebidas conocidas popularmente como “azulitos” y “gomichelas” ha aumentado, lo que contribuye significativamente al aumento de peso, así como desarrollar problemas de salud a largo plazo, como diabetes, ya que sólo una de estas preparaciones de un litro contiene aproximadamente 728 kilocalorías; en caso de beber dos, se cubre en promedio dos tercios del requerimiento diario, que es de dos mil a dos mil 500 calorías.
De acuerdo con el Informe Financiero y Actuarial del ISSSTE, en 2022 se atendió a un millón 145 mil 180 pacientes de 20 años o más por diabetes mellitus, lo que representa la prevalencia de 11.2 por ciento, es decir, aumentó 1.4 puntos porcentuales en comparación con 2021 https://goo.su/6X5oMjU (página 23).
“Hay varias cuestiones que podemos tomar en cuenta para revaluar su consumo, una de las principales es el contenido que tiene de azúcar y calorías vacías. Una sola ‘gomichela’ puede contener tanta azúcar como varias bebidas carbonatadas, refrescos; es decir, que un exceso no nos va a aportar los nutrimentos que necesitamos para cuidarnos como las proteínas y/o grasas.”
Además, la especialista explicó que la mayoría de estas bebidas se preparan con líquidos energizantes, los cuales activan al sistema nervioso para aportar energía, mientras que el alcohol lo inhibe; al combinarlos se genera un choque en el organismo que, con el tiempo, pueden provocar problemas cardiovasculares y representa un riesgo a la salud.
A través de la EDN, el ISSSTE impulsa la cultura preventiva a través de varias acciones, una de las principales es el servicio de alimentos en la escuela, donde se enseña a estudiantes sobre la correcta preparación de manera natural, con balance adecuado.
Además, se cuenta con el Centro de Dietética y Nutrición, cuyo principal objetivo es ofrecer orientación personalizada sobre qué y cuánto comer, de acuerdo a cada persona. La atención se brinda a toda la población, sean o no derechohabientes.
Cuando uno come de manera sana, dijo, previene riesgos de desarrollar alguna enfermedad como diabetes, hipertensión, problemas renales, entre otros que afectan a la población mexicana.
“Una buena alimentación ayuda a procurar nuestra salud. Es importante consumir alimentos ricos en vitaminas, minerales; que sean naturales, evitar lo procesado o industrializado para no enfermarse y sí llevar una excelente calidad de vida.”
Ante las altas temperaturas, es común que las personas busquen consumir bebidas alcohólicas refrescantes; sin embargo, existen alternativas sin alcohol, con menos azúcar, menos calorías, sin ingredientes industrializados, por lo que es importante acudir con un especialista en nutrición, quien puede orientar y apoyar a llevar una sana alimentación de acuerdo con nuestro organismo, concluyó.