Kush
El ‘kush’, una combinación de sustancias químicas altamente adictivas, incluido el fentanilo, ha encontrado un terreno fértil entre los jóvenes de Sierra Leona. Con efectos similares a los del cannabis, esta droga ha desencadenado una espiral de adicción y muerte en la juventud del país.
Solomon Clarke, un joven de 27 años, cuenta su historia de lucha contra la adicción al ‘kush’. Inicialmente, buscó en esta droga una forma de aliviar el estrés y la soledad de su vida en las calles de Freetown. Sin embargo, pronto descubrió los oscuros efectos secundarios de esta elección, que lo han dejado aislado y marginado.
Clarke lamenta haber caído en las garras del ‘kush’ y ha sido testigo de cómo muchos de sus amigos han perdido la vida por el consumo de esta droga. Aunque las cifras oficiales de muertos son difíciles de obtener, los informes de la morgue pública de Freetown revelan un panorama sombrío.
El presidente Julius Maada Bio ha respondido a esta crisis con determinación, declarando una “emergencia nacional” y estableciendo un Grupo de Trabajo Nacional sobre Drogas y Abuso de Sustancias. Este grupo se encargará de implementar programas educativos y campañas para concienciar a los jóvenes sobre los peligros del ‘kush’ y otras drogas.
Sin embargo, algunos críticos señalan que el Gobierno ha actuado con demasiada lentitud para abordar problemas subyacentes como la pobreza y el desempleo, que contribuyen a la propagación del consumo de drogas.
Sierra Leona
Sierra Leona, un país que ha sufrido las cicatrices de la guerra civil y la epidemia de ébola, ahora enfrenta una nueva batalla contra el ‘kush’. Con una población que lucha por satisfacer sus necesidades básicas, el país se encuentra en un momento crítico en su lucha contra esta peligrosa epidemia.
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