En un escenario desolador, la sequía ha extendido su implacable manto sobre prácticamente el 80% del territorio mexicano, según reportes recientes del Monitor de Sequía de México. Esta devastadora situación, agravada por una circulación anticiclónica, ha desencadenado la primera ola de calor de la temporada, sumiendo a numerosas regiones en un ambiente de calor abrasador.
En los últimos 15 días, las condiciones meteorológicas despiadadas han llevado a que el 79.02% del país enfrente los estragos de la sequía. Solo un 20.98% de la nación permanece libre de esta calamidad, según los datos recabados.
La intensidad de la sequía varía, desde condiciones anormalmente secas hasta sequía excepcional (de D0 a D4), afectando a una amplia gama de estados. Guanajuato, Querétaro, San Luis Potosí y Veracruz padecen sequías de extrema a excepcional, mientras que Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, Sinaloa, Durango, Aguascalientes y Michoacán sufren de severa a extrema.
La situación se agrava aún más al observar que 10 estados de la República Mexicana enfrentan una emergencia en cada uno de sus municipios o alcaldías. Aguascalientes, Chihuahua, Ciudad de México, Guanajuato, Hidalgo, Estado de México, Morelos, Querétaro, Sinaloa y Sonora se encuentran en una situación crítica y desesperada.
Ante esta emergencia nacional, se requiere una acción inmediata y coordinada por parte de las autoridades y la sociedad en su conjunto. La escasez de lluvias y la sequía que arrasa con nuestra tierra demanda respuestas urgentes y medidas efectivas para mitigar sus impactos devastadores. ¡El momento de actuar es ahora antes de que sea demasiado tarde!