El día de ayer inicio la temporada primaveral, suele ser de las más esperadas en agricultura ya que se comienzan a preparar los campos para nuevas siembras y mientras que otros recogen sus cosechas del año pasado. También, la vegetación reverdece gracias a los primeros aguaceros, además diferentes especies animales se reproducen o tienen sus crías, al igual que las flores.
Pero, también en para la meteorología es una temporada importante, pues se trata de una de las estaciones donde se tiene una mayor interacción en entre las superficie terrestre, el océano y la atmósfera, este constante intercambio de energía ambiental genera tormentas convectivas únicas acompañadas de estruendosos y vistosos electrometeoros, de pedruscos de hielo (granizo y graupel) y de precipitaciones de diferentes tipos.
Mientras que la temperatura ambiente se calienta gradualmente conforme nos internamos más en la estación primaveral, esta condición beneficia en el proceso de fotosíntesis en la vegetación y también mantiene activo el ciclo del agua condición que favorece enormemente la vida en la biosfera.
En qué se diferencia la primavera meteorológica de la primavera astronómica
La primavera meteorológica comienza el 1 de marzo y finaliza el 31 de mayo. Esto es unos 20 días antes del comienzo y el final de la primavera astronómica, que comienza el 19 de marzo y finaliza el 20 de junio de este año.
Las estaciones meteorológicas siguen el ciclo de temperatura anual. El verano y el invierno meteorológicos, por ejemplo, representan los meses más cálidos y más fríos del año, respectivamente. La primavera meteorológica en este caso representa marzo, abril y mayo, los meses en los que el clima pasa de frío a cálido.
