Un bloqueo organizado por varios taxistas en Periférico Sur, específicamente a la altura de la avenida Luis Cabrera. Este evento ha provocado un considerable caos vial, afectando a miles de ciudadanos en su rutina diaria. La rápida respuesta de las autoridades y las alternativas viales propuestas son cruciales para mitigar el impacto de esta situación.
Durante la tarde del 26 de febrero, la pacífica cotidianidad de Periférico Sur se vio interrumpida por un inesperado bloqueo de taxistas. La manifestación causó un embotellamiento masivo, extendiéndose por kilómetros y complicando el tránsito en una de las arterias más importantes de la capital. Los conductores, atrapados en la inmensa fila de vehículos, expresaron su frustración ante la falta de fluidez vehicular.
Ante el caos generado, la Secretaría de Gobierno de la Ciudad de México actuó de manera inmediata, enviando representantes para dialogar con los manifestantes en un intento por liberar la vialidad. Paralelamente, el Centro de Orientación Vial de la Secretaría de Seguridad Ciudadana capitalina ofreció alternativas viales para aquellos afectados por el bloqueo, recomendando la avenida Insurgentes Sur y avenida Paseo de Pedregal como rutas alternas.