El primer ministro polaco, Donald Tusk, se comprometió este lunes a “revitalizar” las relaciones de su país con otras naciones europeas durante su visita a París y Berlín. Este movimiento surge en medio de la preocupación en Europa ante la posibilidad de que Donald Trump regrese a la presidencia de Estados Unidos. Y que con ello, otorgue a Rusia el permiso para continuar su agresión, tras la invasión de Ucrania.
Trump sugiere a Rusia atacar
Las reuniones del lunes tuvieron lugar después de que Trump sorprendiera a muchos líderes europeos al sugerir que Rusia podría invadir cualquier país europeo que no gaste lo suficiente en su propia defensa.
“Estos comentarios no sólo son irresponsables sino que también benefician a Rusia”, declaró el presidente alemán Frank-Walter Steinmeier durante su visita a Chipre. “Y nadie en nuestra alianza podría estar interesado en eso”.
La retórica de Trump causó particular asombro en países periféricos de la OTAN como Polonia, históricamente víctima de agresiones rusas, donde la ansiedad es alta debido a la guerra en Ucrania.
Tusk se reunió con Emmanuel Macron
Durante su almuerzo de trabajo en el Palacio de los Elíseos, Tusk se reunió con el presidente francés Emmanuel Macron. Y se enfatizó la necesidad de “revitalizar las relaciones de Polonia con los socios europeos más importantes”.
Tusk destacó que “no hay alternativa a la Unión Europea, no hay alternativa a la cooperación transatlántica, no hay alternativa a la OTAN”.
Además, expresó la importancia de que Europa se convierta en un continente seguro. Implicando que la UE, Francia y Polonia deben ser países fuertes dispuestos a defender sus fronteras. Además de apoyar a sus aliados y amigos fuera de la Unión Europea.
Macron elogió el papel destacado que Francia y Polonia están desempeñando en la seguridad y defensa en Europa, especialmente en el contexto de la guerra en Ucrania.
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