La escasez de agua no sólo depende de la cantidad sino de su calidad. Un estudio indica que un tercio de las subcuencas del planeta se enfrentarán a una grave escasez de agua limpia en 2050, lo que podría afectar a 3.000 millones adicionales de personas.
Un estudio basado en modelos que publica Nature Communications analizó más de 10.000 subcuencas (unidades en que se dividen la cuencas fluviales) para hacer una evaluación global de la futura escasez de agua limpia en la década de 2050.
En su análisis, los autores encabezados por la Universidad de Wageningen (Holanda) añadieron el aspecto de la contaminación del agua a las evaluaciones clásicas de la escasez inducida por la cantidad de agua.
El equipo se centró en la contaminación por nitrógeno de los ríos y descubrieron que esta aumenta drásticamente el número de sistemas de cuencas fluviales que pueden considerarse con escasez de agua si se tiene en cuenta la calidad del agua.