Agrupaciones LGBTI protestaron este lunes en el Palacio Nacional de México, donde vive y trabaja el presidente Andrés Manuel López Obrador, tras la muerte de la activista y política Samantha Fonseca, la cuarta mujer trans asesinada en lo que va del año en el país.
Las manifestantes, en su mayoría mujeres trans, pintaron el muro del recinto con consignas como “las vidas trans importan”, “México transfóbico” y “Ley integral trans”.
“¿Hasta cuándo van a parar los asesinatos y los crímenes contra las personas trans? ¿Cuánto más tendremos que tolerar?”, manifestó una de las voceras mediante un altavoz.
La protesta ocurre tras el asesinato de Fonseca, a quien balearon el domingo cuando salía del Reclusorio Sur de Ciudad de México, donde era defensora de derechos humanos y había participado en el gobernante Movimiento Regeneración Nacional (Morena), partido de López Obrador.
Este es ya el cuarto asesinato de una persona trans en los primeros 15 días del año en México, donde el sábado reportaron el hallazgo del cadáver de una mujer trans no identificada en Tlaquepaque, en el estado de Jalisco.
El jueves pasado mataron a Miriam Ríos Ríos, comisionada trans del partido opositor Movimiento Ciudadano (MC) en Michoacán, estado del oeste del país.
Y el 6 de enero apareció muerta la estilista Gaby Ortiz en el estado de Hidalgo junto a una cartulina con un mensaje de odio.
La indignación ha crecido porque el lunes pasado López Obrador se refirió a una diputada trans de su partido, Salma Luévano, como “un señor vestido de mujer”, aunque un día después pidió perdón y reconoció el derecho a la identidad de género.
“Andrés Manuel, eres un señor vestido de izquierda”, expresó ahora una de las manifestantes.
Aunque al menos 20 de los 32 estados han legislado la identidad de género, México es el segundo país de Latinoamérica con más violencia por homofobia y transfobia, después de Brasil, según el Observatorio Nacional de Crímenes de Odio LGBT de la Fundación Arcoíris.
En México hubo 52 asesinatos de personas trans y de género diverso entre octubre de 2022 y septiembre de 2023, solo por debajo de 100 en Brasil, según datos del proyecto de investigación Monitoreo de Asesinatos Trans 2023, de TGEU (Transgender Europe) citados por Statista.