Consejeros del INE evidenciaron una previsible ruptura que derivaría en un crisis institucional por falta de nombramientos en áreas relevantes.
En franca postura respecto al manejo de la presidencia del INE, los consejeros evidenciaron una previsible ruptura que derivaría en una crisis institucional, el motivo, la falta de nombramientos en áreas de relevancia interna.
La consejera presidente Guadalupe Taddei aseveró que, el proyecto que plantea un bloque que busca establecer límites para nombrar funcionarios, va contra la legalidad del propio Instituto Nacional Electoral (INE) a través de una “invitación flagrante a romper con el orden constitucional”.
Es un llamado a romper justamente la legalidad que nos ocupa”, expresó.
De las molestias principales, abundó el consejero electoral Jaime Rivera, es la falta de consensos y una prolongación irregular para nombrar al titular de la Secretaría Ejecutiva, y el abuso para solo nombrar encargados de despacho.
La consejera presidenta ha utilizado con exceso esa previsión legal y reglamentaria, con exceso por lo menos en el tiempo, y en el momento en que se ha presentado esta respuesta, el carácter provisional es por lo menos dudoso”.
La contraparte presentó un proyecto liderado por el consejero Jorge Montaño, que después de la reflexión de su compañero, decidió retirarlo del orden del día; su propuesta daba más atribuciones a Taddei Zavala para designar en direcciones y unidades.
“La renuncia a la negociación política es la renuncia al acuerdo al que este Consejo está obligado”, sostuvo Espadas Ancona.
En respuesta la consejera Dania Ravel aclaró que lo pretendido por Montaño Ventura caía en una ilegalidad, y son al menos siete acéfalas en medio de un complejo proceso de elecciones.
“Nosotros no podemos hacer o estar de manera pasiva estando en medio de un proceso electoral teniendo tantas áreas importantes en personas titulares, tener una persona titular también le da estabilidad y certeza a las personas que laboran en una estructura”
De esta forma, los encargados de despacho cinco de las seis direcciones ejecutivas, y cinco de 11 unidades técnicas, podrían ascender a la Secretaría Ejecutiva como encargados y sin tener el respaldo de la mayoría de los Consejeros.