La Unión Europea planea dejar los combustibles fósiles procedentes de Rusia para 2027, aunque ha día de hoy, eso es totalmente diferente, ya que los países europeos han batido récords de compra de combustibles.
Países como Ucrania, Estonia y Lituania compraron alrededor de 6.100 millones de euros en gas natural licuado, así lo ha informado Telegraph citando a Eurostat.
Las entregas del gas natural licuado ha Europa han alcanzado un nuevo récord de 16.700 millones de metros cúbicos durante el año 2022, esto frente a los 12.300 millones de metros cúbicos entregados en el año 2021.
España y Bélgica son los mayores clientes de los rusos. De acuerdo a estimaciones del Instituto de Economía Energética y Análisis Financiero, durante le periodo de enero a octubre del año 2023, Madrid compró alrededor de 5.210 millones de metros cúbicos. Por su parte Bruselas adquirió la cantidad de 3.140 millones de metros cúbicos.
Kpler, es una empresa francesa dedicada a estudiar datos sobre mercados de materias primas, y han señalado que el gas natural licuado proveniente de Rusia, representa el 16% de las importaciones totales de la Unión Europea.
España pago alrededor de 1.800 millones de euros a Moscú, mientras que Francia y Bélgica por su parte, mandaron 1.500 y 1.360 millones de euros respectivamente.
Demanda del gas en Europa
Aunque muchos gobiernos han declarado un rechazo al gas ruso, la realidad es todo lo contrario, y lo peor es que se prevé que los volúmenes de importaciones sigan aumentando.
Los países europeos se encuentran viviendo una gran crisis energética debido a los altos precios del gas y la electricidad. Esto después de que los precios se dispararan debido a las sanciones que se le impusieron a Rusia por su conflicto con Ucrania.
Desde Rusia, han declarado en varias ocasiones que la Unión Europea cometió un grave error al renunciar a los hidrocarburos rusos.
