Por: Azul Etcheverry Aranda
El 8 de noviembre se conmemoró el Día de la Persona Diplomática Mexicana, desde 2018 se celebra este día con la intención de reconocer la labor de las y los mexicanos en el exterior que trabajan para servir a nuestra comunidad en el mundo, principalmente a los miembros del Servicio Exterior Mexicano quienes dedican su vida y carrera profesional a esta importante labor. Se eligió este día por ser en el cual se creó, hace 202 años, la Secretaría de Negocios y Relaciones Interiores y Exteriores del México independiente.
162 representaciones de México en el exterior, incluyendo embajadas, consulados, misiones permanentes y oficinas de enlace alrededor del mundo donde se ejecuta la política exterior mexicana que va desde temas de protección a mexicanos hasta asuntos multilaterales como el desarme nuclear, por el que el diplomático mexicano, Alfonso García Robles fue galardonado con el Premio Nobel de la Paz en 1982.
Nuestro país se ubica dentro de las primeras 15 naciones que más representaciones tiene en el exterior y es la red consular más robusta en el vecino país del norte con 53 consulados, es decir, ningún otro país tiene más representaciones en otro más que México en Estados Unidos, por obvias razones y con el firme objetivo de documentar, proteger y asesorar a nuestros connacionales. Además, el Servicio Exterior Mexicano es de los servicios civiles más preparados del país, para ingresar es necesario no solamente contar con el perfil sino tener éxito en un proceso de selección complejo y que requiere de mucha preparación. A nivel regional, este cuerpo diplomático es de los más refinados junto con el brasileño o el cubano.
Al manejarse una gran variedad de temas, el diplomático mexicano tiene que ser un profesional multicultural y multidisciplinario que tenga las herramientas profesionales e intelectuales que le permitan liderar desde un caso de un mexicano en situación de vulnerabilidad en cualquier país hasta hablar en el Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas,
Además de los diplomáticos pertenecientes al Servicio Exterior Mexicano, también existe en las embajadas y consulados la figura de los empleados locales, estos trabajadores son también de vital importancia para el funcionamiento de las representaciones, pues son ellos quienes llevan a cabo la operación que lideran los miembros del SEM, muchos de estos trabajadores también pueden desde montar toda una instalación para la documentación de mexicanos, auxiliar a los nuestros sin importar la hora del día, o presentar los servicios consulares ante organizaciones y autoridades extranjeras, ellos también son unos verdaderos camaleones de la diplomacia y las relaciones internacionales.
Todos ellos dejan sus seguridades, familia y querido México eligiendo servirlo desde afuera para llevar una vida de servicio y sacrificio para el país, el reconocimiento para todos y que su ejemplo se replique en toda la administración pública.
