La 79ª Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), celebrada en la Ciudad de México, no solo marcó el fin de una era con la jubilación de Ricardo Trotti, tras 31 años de dedicación, sino que también fue un tributo a la lucha por la libertad de expresión y la justicia para periodistas asesinados.
Legado de 100 Años de Compromiso
Ricardo Trotti, quien ocupó la Dirección Ejecutiva durante ocho años, recordó el centenario de la fundación de la SIP. Destacó la persistencia y dedicación de generaciones anteriores que han sostenido el firme compromiso por la libertad de prensa y expresión. Trotti resaltó la importancia de esta institución, no solo por su lucha constante por la democracia, sino por su legado de sabiduría, que se ha transmitido de una generación a otra, fortaleciendo la convicción de que la sociedad no puede existir sin libertad de prensa.
Homenaje a la Excelencia Periodística
La Asamblea no solo fue un evento conmemorativo, sino también una oportunidad para reconocer la excelencia periodística. La SIP otorgó los Premios a la Excelencia Periodística en 14 categorías a profesionales de medios en América Latina, Estados Unidos y Europa. Periodistas de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Francia, México, Panamá, Perú, Puerto Rico y Venezuela fueron honrados por su destacado trabajo en el campo del periodismo.
Reflexiones sobre la Libertad de Prensa y Periodismo Emprendedor
La cuarta jornada de la Asamblea se centró en paneles que abordaron desafíos y temas vitales para el periodismo. La enseñanza del periodismo emprendedor en universidades latinoamericanas, la sostenibilidad de los medios y la protección de periodistas, fuentes y datos fueron temas discutidos con profundidad. La necesidad de un periodismo sólido, emprendedor y ético en un entorno en el que la libertad de prensa a menudo enfrenta desafíos fue el foco de estas discusiones.
Un Homenaje al Periodismo y a la Libertad de Expresión
La Asamblea de la SIP no solo celebró los logros periodísticos, sino también sirvió como recordatorio de la lucha continua por la libertad de expresión. Es un tributo a la valentía de quienes han pagado el precio máximo por ejercer la libertad de prensa y expresión. Es un llamado para que las sociedades protejan y valoren la libertad de prensa como un pilar fundamental de la democracia y el progreso.