En un emotivo y memorable acto, el icónico lanzador mexicano Fernando Valenzuela fue objeto de un merecido homenaje en el Dodger Stadium, un lugar que albergó sus glorias y hazañas a lo largo de la década de los 80. La ceremonia, cargada de emoción y reconocimiento, reunió a admiradores, colegas y familiares del legendario jugador, quien se convirtió en una inspiración para generaciones de jóvenes deportistas que aspiran a superarse.
Durante el evento, Jaime Jarrín, el histórico narrador de los Dodgers, expresó con profunda admiración: “Saludo y le rindo pleitesía a Fernando Valenzuela porque ha sido, entre otras cosas, inspiración para los niños que desean superarse”. Jarrín, cuya voz se convirtió en la banda sonora de los momentos más emblemáticos del béisbol, capturó con sus palabras el sentimiento generalizado de admiración y respeto hacia Valenzuela.
El senador Alex Padilla también tomó la palabra en el homenaje, destacando a Valenzuela como un “orgullo para nuestra comunidad”. Enfatizó la importancia de que el número 34, que Valenzuela portó con honor, finalmente sea retirado en reconocimiento a su legado, siguiendo la tradición de otros jugadores legendarios de los Dodgers.
Fernando Valenzuela estuvo acompañado por su amada esposa, la maestra yucateca Linda Burgos, así como por sus cuatro hijos, dos mujeres y dos hombres, incluido Fernando Junior, quien ostenta la presidencia de los Tigres de Quintana Roo, equipo que es propiedad de la familia Valenzuela. También compartieron este emotivo momento con él sus 12 nietas, dando un toque de calidez familiar al evento.
La pantalla del Dodger Stadium se iluminó con mensajes en video de diversas personalidades del deporte que deseaban felicitar a Valenzuela en esta ocasión especial. Figuras como Julio César Chávez, los retirados peloteros mexicanos Adrián González y Nomar Garcíaparra, así como el exlanzador Orel Hersheiser, expresaron sus saludos y reconocimiento, provocando una ovación apasionada por parte de los aficionados presentes.
La familia Valenzuela, esparcida por diferentes lugares, también se sumó a los mensajes de felicitación a través de videos. Desde el ejido de Etchohuaquila, Sonora, la hermana de Fernando Valenzuela compartió su alegría por este merecido homenaje, acompañada por sus hermanos Francisco, Gerardo, Manuel y Daniel.
Con gratitud en su voz, Fernando Valenzuela agradeció profundamente el gesto de retirar su número y brindó un sentido aplauso a la afición, a quienes considera una parte fundamental de su carrera y éxito. Posteriormente, en un momento cargado de simbolismo, Valenzuela, rodeado por su familia y sosteniendo la mano de su esposa, caminó hacia la zona del jardín izquierdo para contemplar su número 34 en el tercer nivel del Dodger Stadium, un lugar de honor junto a los otros números retirados por el equipo a lo largo de su historia.
El homenaje a Fernando Valenzuela no se detiene en la ceremonia. En un fin de semana especial dedicado a la “Fernandomanía”, los aficionados recibirán un bubblehead de Valenzuela el sábado 12, y el domingo tendrán la oportunidad de llevarse una réplica del anillo de la Serie Mundial de 1981, un hito que Valenzuela contribuyó a conquistar como pitcher abridor.
Como un broche de oro, la alcaldesa de Los Ángeles proclamó el 11 de agosto como el “Día de Fernando Valenzuela”, reconociendo así la trascendencia y legado del gran lanzador mexicano que dejó una huella imborrable en la historia del béisbol y en el corazón de sus admiradores.
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