Un indígena de la remota aldea de Nova Esperança, en la Amazonía brasileña, se conecta a TikTok desde su hogar cubierto de tatuajes rojos, que imitan las manchas del jaguar. Al ver un video titulado “Si yo fuera rico”, suelta una carcajada.
La alianza entre Starlink y el gobierno local lleva internet a comunidades aisladas
El pueblo matsés da un salto a la modernidad gracias al internet proporcionado por Starlink, la conexión a través de la constelación de satélites del multimillonario estadounidense Elon Musk. La financiación del gobierno local ha permitido que la señal llegue al Valle del Javarí, hogar de las comunidades indígenas más aisladas de la selva amazónica.
Una instalación rápida y sencilla para conectar a las comunidades
Los vecinos de Nova Esperança se reunieron para presenciar la instalación de la antena y el panel solar que la alimenta. El proceso tardó menos de 30 minutos y los trabajadores utilizaron una escalera para ubicar los equipos en el tejado de la escuela.
Un salto generacional en el acceso a internet
Starlink, de SpaceX, está proporcionando internet de alta velocidad vía satélite en áreas donde los principales proveedores de servicios no llegan. Los matsés son uno de los siete pueblos contactados del Valle del Javarí, la segunda reserva indígena más grande de Brasil, donde aún habitan al menos 19 grupos indígenas que viven en aislamiento voluntario.
Un beneficio para la salud y la educación de la comunidad
Para Bene Mayuruna, Presidente de la Organización General del Pueblo Matsés (OGM), esta conexión significa poder estar en Atalaia do Norte, donde desempeña sus responsabilidades políticas, sin perder contacto con su familia en la aldea. Aparte de facilitar la educación y trámites oficiales, internet también debería mejorar el trabajo del SESAI, el organismo de salud indígena que atiende a casi todas las comunidades de Javarí.
Un desafío para la cultura y el territorio
A pesar de los beneficios, algunos matsés preocupados por las tradiciones se mantienen recelosos. En cuanto se instaló la antena, los ancianos convocaron una reunión para discutir las normas de uso. Además, existe la preocupación de que la conexión pueda ser utilizada por criminales que exploren ilegalmente la tierra indígena.
“Tenemos que tener cuidado con lo que publicamos en las redes sociales, porque hay muchos invasores que quieren entrar en nuestro territorio”, advierte Bene Mayuruna.
El internet de Starlink, que ya tiene unos 50.000 usuarios en todo Brasil, abre una ventana al mundo para los indígenas de la Amazonía, pero también plantea nuevos retos para preservar su identidad y su entorno. Esta conectividad ofrece oportunidades sin precedentes para estas comunidades, pero es fundamental abordar los desafíos para garantizar la protección de su cultura y territorio.
