En un operativo realizado contra talamontes en la carretera México-Cuernavaca, se llevó a cabo un importante decomiso de madera, maquinaria, sierras, herramientas y vehículos presuntamente robados y remarcados. Sin embargo, lo que pudo haber sido un logro contundente en la lucha contra la tala ilegal de árboles se vio afectado por un bloqueo y la presión ejercida por familiares de los aproximadamente 40 detenidos por la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (Corenadr).
El operativo se desplegó en las zonas de Topilejo, Tlalpan y Huitzilac, Morelos, y resultó en la detención de personas señaladas por el delito de tala ilegal. Los presuntos implicados fueron trasladados a las instalaciones de la Corena, donde se tomarían sus datos y declaraciones.
Sin embargo, la situación se complicó cuando pobladores de Huitzilac impidieron el traslado de la madera decomisada y se dispusieron a quemar los vehículos de la Corena. Este conflicto llevó a que los detenidos fueran liberados después de varias horas de bloqueo y presión por parte de sus familiares.
Durante la intervención de las autoridades, se aseguraron cuatro aserraderos supuestamente ilegales en la comunidad de Huitzilac, Morelos. También se logró el decomiso de una gran cantidad de madera, maquinaria, sierras, herramientas y vehículos que se presumen fueron robados y remarcados para su uso en actividades ilegales.
El operativo es parte de los esfuerzos para combatir la tala ilegal en distintas zonas de la Ciudad de México, incluyendo Tlalpan, Álvaro Obregón, Milpa Alta, Cuajimalpa y Gustavo A. Madero, que han sido identificadas como áreas con mayor incidencia de este delito. En lo que va del 2023, se han recibido 62 denuncias relacionadas con actividades de tala ilegal.
Finalmente, tras varias horas de bloqueo, los detenidos rindieron su declaración y fueron liberados, lo que permitió que se retiraran los pobladores de Topilejo y que los uniformados de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y de la Guardia Nacional se retiraran del sitio tras calmar los ánimos.
La liberación de los presuntos talamontes plantea un desafío para las autoridades, que ahora deberán buscar estrategias para asegurar que las personas detenidas enfrenten las consecuencias de sus acciones y para prevenir futuras situaciones de bloqueo y presión que puedan dificultar las operaciones contra la tala ilegal. La lucha por la protección de los recursos naturales y la preservación del medio ambiente sigue siendo un desafío importante para México y requerirá esfuerzos coordinados y acciones efectivas para combatir este tipo de delitos.
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