Dentro de un año, la ciudad de París se encuentra en la fase final de una histórica limpieza que permitirá a los nadadores y clavadistas volver a disfrutar del río Sena.
Durante más de un siglo, la natación en estas aguas había sido prohibida debido a su contaminación, pero ahora, gracias a un proyecto de regeneración aclamado internacionalmente y con un costo de 1.400 millones de euros (aproximadamente US$1.600 millones), esta prohibición se revertirá.
¿Por qué se limpió el río Sena?
Los Juegos Olímpicos, que tendrán lugar en un año, jugarán un papel importante en este cambio, ya que se han programado tres eventos olímpicos y paralímpicos en el Sena, incluyendo el triatlón, la maratón de natación y el paratriatlón. Además, para el año 2025, se habilitarán tres áreas de natación al aire libre desde el muelle, lo que permitirá a los ciudadanos acceder a estas zonas y disfrutar del río de manera segura.
La calidad del agua en el Sena ha disminuido drásticamente en el pasado debido a las aguas residuales industriales y las demandas de saneamiento de una población en crecimiento. Sin embargo, en las últimas dos décadas, se han realizado mejoras significativas en la reducción de las bacterias fecales que ingresan al río.
¿Cómo se realizó este proyecto?
Una solución innovadora para garantizar la limpieza del río ha sido la construcción de un embalse subterráneo, una enorme estructura que almacena el exceso de agua durante fuertes lluvias y evita que las aguas residuales lleguen al río. Esta megacuenca estará en pleno funcionamiento para los Juegos Olímpicos del próximo año.
Aun existirán riesgos..
A pesar de ser limpiado con este mega proyecto, todavía se debe tener precaución con respecto a las ratas presentes en las áreas cercanas al río, los estudios han demostrado que la cantidad de bacterias de la leptospirosis no es anormalmente alta en el Sena, por lo que se espera que no haya mayores problemas relacionados con esta enfermedad transmitida por las ratas.
Este proceso de limpieza ha sido todo un logro, y París se enorgullece de revitalizar el río no solo como un lugar deportivo, sino también como un escenario para la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos. Además, el regreso de diversas especies de peces, moluscos, insectos acuáticos, esponjas y cangrejos de río al Sena demuestra que la naturaleza también ha vuelto a prosperar en estas aguas.
Con la esperanza de un futuro más limpio y con la posibilidad de nadar de nuevo en el río, los parisinos esperan ansiosos el inicio de los Juegos Olímpicos, que serán un hito para la ciudad y un legado duradero para las generaciones venideras.
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