DANTE

Por Adriana Delgado Ruiz | @AdriDelgadoRuiz

“Nunca desafíes a una persona que no tiene nada que perder. Cuando lo perdió todo, también perdió el miedo”. Es el estigma del PRI frente a Dante Delgado desde 1994, cuando su sucesor en el gobierno de Veracruz y enemigo político, Patricio Chirinos, hizo que Miguel Ángel Yunes operara su encarcelamiento, con la connivencia de Ernesto Zedillo.
Dante fue acusado injustamente del supuesto desvío de 450 millones de pesos. El partido le dio la espalda. 15 meses después, fue absuelto, liberado y se convirtió en el primer exservidor público mexicano que ha ganado una demanda por daño moral contra el Estado.
Así emergió el estratega político opositor, reflexivo pero extrovertido al punto del apasionamiento a la hora de las declaraciones. Amante de La Columna de Hierro, novela histórica que muestra a Marco Tulio Cicerón en la Roma Imperial, como un agudo analista del mundo que le rodeaba.
Dante es un hombre de afectos profundos, perdones cortos y olvidos permanentes. Tras los comicios de 1997 en que el PRI perdió el control del Congreso y el gobierno de la capital, decidió que era momento de fundar un partido e ir ganando espacios. Había llegado la época del agotamiento del sistema político, el transfuguismo y la construcción de alternativas.
Hoy, Movimiento Ciudadano gobierna Jalisco, Nuevo León, es ya la tercera bancada más grande en el Senado tras la desbandada priista y en su historia ha ganado elecciones con alianzas, pero nunca con el PRI.
MC es el único partido que no ha iniciado el proceso para designar a su candidato presidencial. Eso lo convierte en alternativa. Dante Delgado es un estratega que entiende los tiempos y sabe conquistar a sus adversarios desde dentro. Tiene abierta la puerta para los ahora ex priistas que pueden sumar a su causa, como Eruviel Ávila y Miguel Ángel Osorio Chong, quien es además otro estratega de alto calibre.
Otros maliciosos apuntan que Marcelo Ebrard ha trabajado la candidatura de MC, en espera de los tiempos para romper con Morena o si le hacen una “chicanada”.
Dante Delgado sabe que el 2024 de Movimiento Ciudadano no está en la Presidencia, sino en el Congreso. Apuesta por el futuro y lo hace paso a paso. No PRI, no Morena, pero sí a la formación de cuadros políticos que aporten nuevos

rostros y complementen a los personajes actuales mientras se preparan para el relevo generacional.
¿Recuerda usted a Mexicolectivo? Esa organización de la que Dante es parte, nació en enero con 300 figuras de filiaciones políticas diversas y organizaciones sociales, con un documento que titularon “Punto de Partida, una nueva visión de país” en que se esboza un plan general de políticas públicas.
Se pusieron como objetivo pasar todo el primer semestre del año sumando simpatizantes y propuestas ciudadanas. Así, el lunes próximo, Mexicolectivo hará su relanzamiento.
Una de las propuestas es la de una reforma fiscal progresiva, planteada por el exsecretario de Hacienda, Carlos Urzúa. El tema, si bien es un asesino de capital político, será ineludible para quien ocupe la silla presidencial el próximo sexenio y hay que abordarlo también desde el Congreso. Así se nutren de ideas y de ciudadanía. Su construcción va más allá de lo sexenal.
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