Viernes XII del tiempo ordinario, ciclo A
30 de junio de 2023
Primeros santos mártires de la Iglesia Romana
Por Sacerdote Daniel Valdez García
El pasaje del evangelio tomado de san Mateo nos ofrece la sensibilidad de Jesús ante el enfermo, en este caso se trata de la lepra.
En la época de Jesús había más de 20 enfermedades de la piel y todas eran consideradas como lepra. Dicha enfermedad aislaba al enfermo del templo y de la comunidad. Por eso Jesús envía al leproso a presentar su ofrenda y recibir de ellos el certificado de salud y de reincorporación a la comunidad.
Es sumamente importante tener en cuenta que los enfermos no solo sufren en físicamente sino también moral y espiritualmente. Por eso ante el sufrimiento para aliviar tanto dolor se necesita sensibilidad honesta y voluntad bien dispuesta.
La enfermedad es parte de nuestra fragilidad y una oportunidad de vivir la generosa solidaridad. La empatía para con los pacientes lleva al trato grato, digno y adecuado.
Jesús es sensible al sufrimiento de los enfermos y eso mismo pide a las autoridades y sacerdotes de su tiempo, por eso envía al leproso con los sacerdotes, de tal manera que se despierte en ellos el interés por quienes viven esta situación de marginación y exclusión.
Para ayudar a aliviar el sufrimiento se necesita sensibilidad honesta y voluntad bien dispuesta. Recuerden que el personal de salud también sufre. Hay al respecto un artículo de la escuela de medicina de la universidad de Oxford que se llama “Second victim”.